Si el equipo de Herrero consigue tres triunfos incluso podría conseguir evitar la promoción para seguir en Segunda B
Ahí están. Después de la espectacular victoria en Lleida, la UD Alzira se coloca en una posición de privilegio para poder eludir el descenso que muy pocos podían pensar tan solo dos jornadas atrás.
Ocho jornadas invicto, aunque de ellas seis finalizaron con empate, resultado que muy poco favorecía a los intereses del club de la Ribera del Xúquer, junto a las dos últimas victorias y los resultados de esta última jornada en la que sus rivales más directos para mantener la categoría de Segunda B perdieron sus partidos, han dejado a los alzireños a expensas de lo que ellos sean capaces de hacer. Es más, si logra la victoria en las tres jornadas que quedan podrían incluso eludir la promoción por la permanencia.
Con la parte deportiva en muy buena posición para conseguir el objetivo de seguir en la categoría, queda todavía la parte social del club por dilucidar. Las deudas con la plantilla de jugadores siguen en punto muerto, aunque la directiva trabaja a destajo para poder hacer frente a sus obligaciones y evitar que el final de temporada sea una debacle para el club. Sería gracioso que se evitara el descenso deportivo y se lograra el descenso administrativo por falta de pago.
Pero en medio de este 'tsunami' que se vive en el seno del club en lo social, está la figura de Javier Soriano. El letrado de Puçol que aterrizó en la UD Alzira en el mes de diciembre con un proyecto más que ambicioso que al final ha quedado en nada, tras hacer un mutis por el foro ha vuelto a salir a escena en el partido de Lleida con nuevas promesas de ser el salvador. Puede que lo sea, pero primero tendrá que aclarar cuentas con la UD Alzira, ya que no está claro qué puso y qué se llevó. Además, la famosa prima de 10.000 euros prometida por él por ganar al Orihuela tampoco la pagó.
Vicent Cucarella
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