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EL SEIS DOBLE
jueves, 4 de abril de 2024
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El MUMA ofereix a Alzira l'exposició de Ripollés 'Retrospectiva'Es pot visitar fins al dissabte 6 d'abril de 2024
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La Regidoria de Patrimoni Històric comunica que, atés l’èxit de l’exposició «Ripollés, Retrospectiva», inaugurada el 2 de febrer en les sales del MUMA, i prevista fins al 3 de març, es prorroga al dissabte 6 d’abril.
L’Ajuntament i l’Associació Cultural de la Falla Plaça Germanies vos conviden a visitar-la i fruir de l’obra d’este gran artista creador d’un art propi i característic, reconegut internacionalment.
Fins al 6 d’abril, podeu visitar al MUMA l’exposició «Ripollés, retrospectiva», amb l’obra d’este artista genial i el bust que n’ha fet d’ell, un altre alzireny, Jordi Benavent.
Ajuntament d’Alzira
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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Ocio en Alzira : Actos, espectáculos y actividades,
Secciones : Patrimoni Històric i Turisme,
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Benito - 31/01/2024
El MUMA es como un cajón de sastre, igual sirve para un roto que para un descosido.
¡Por fin! A ver lo que D. Bernardo Montagud (aunque ya lo puedo imaginar).
"Pero la verdad es la verdad, lo diga Agamenón o su porquero (Juan de Mairena, por boca de Antonio Machado). Yo cambiaría la palabra 'verdad' por un término más escatológico (en el sentido fisiológico).
Beethoven, Mozart... hacían música; también la hacen (dicen) Maluma y Bad Bunny. Hemos pasado de Goya y Velázquez a Ripollés.
El MUMA es como un cajón de sastre, igual sirve para un roto que para un descosido.
¡Por fin! A ver lo que D. Bernardo Montagud (aunque ya lo puedo imaginar).
"Pero la verdad es la verdad, lo diga Agamenón o su porquero (Juan de Mairena, por boca de Antonio Machado). Yo cambiaría la palabra 'verdad' por un término más escatológico (en el sentido fisiológico).
Beethoven, Mozart... hacían música; también la hacen (dicen) Maluma y Bad Bunny. Hemos pasado de Goya y Velázquez a Ripollés.
Bernat Montagud - 06/02/2024
"Benito", admiro la capacidad de ilusión y creatividad de personas que como Ripollés, cumplidos los 92 años continuan trabajando. Espero visitar la exposición para poder opinar, con mayor conocimiento acerca de las últimas creaciones del pintor alcireño. En una pasada entrega del SEIS DOBLE, escuché los cortes de voz del artista. Como en anteriores ocasiones, se nos muestra como un tipo humilde, jovial y satisfecho con su trayectoria.Por las iámgenes reproducidas en este diario digital pude ver que Ripollés continua siendo un tipo divertido. En sus autorretartos sigue apareciendo como el niño que pinta y se divierte alcanzando con su pincel, como un Alonso Quijano, las estrellas. Aguardo contemplar las texturas de sus grabados y óleos. Una fotografía permite una aproximación pero espero conocer los originales. Mientras me quedo y comparto su alegría de vivir. Camino de mis 77, personas como el beato Ripo me hacen mirar el futuro con esperanza.Por cierto Benito, comparto tu admiración y conocimiento por Antonio Machado. Con los amigos, con relativa frecuencia visito Rocafort y me imagino ver pasear a Machado por los jardines de Villa Amparo. Incluye en la nómina de los pintores que citas a Rafael Armengol, quien a sus 82 años inauguró en Valencia la misma tarde en que Ripollés, por segunda ocasión, expuso en su puenlo natal.. Saludos.
"Benito", admiro la capacidad de ilusión y creatividad de personas que como Ripollés, cumplidos los 92 años continuan trabajando. Espero visitar la exposición para poder opinar, con mayor conocimiento acerca de las últimas creaciones del pintor alcireño. En una pasada entrega del SEIS DOBLE, escuché los cortes de voz del artista. Como en anteriores ocasiones, se nos muestra como un tipo humilde, jovial y satisfecho con su trayectoria.Por las iámgenes reproducidas en este diario digital pude ver que Ripollés continua siendo un tipo divertido. En sus autorretartos sigue apareciendo como el niño que pinta y se divierte alcanzando con su pincel, como un Alonso Quijano, las estrellas. Aguardo contemplar las texturas de sus grabados y óleos. Una fotografía permite una aproximación pero espero conocer los originales. Mientras me quedo y comparto su alegría de vivir. Camino de mis 77, personas como el beato Ripo me hacen mirar el futuro con esperanza.Por cierto Benito, comparto tu admiración y conocimiento por Antonio Machado. Con los amigos, con relativa frecuencia visito Rocafort y me imagino ver pasear a Machado por los jardines de Villa Amparo. Incluye en la nómina de los pintores que citas a Rafael Armengol, quien a sus 82 años inauguró en Valencia la misma tarde en que Ripollés, por segunda ocasión, expuso en su puenlo natal.. Saludos.
Benito - 14/02/2024
Don Bernardo, casualmente, el pasado lunes estuve en Madrid por motivos de trabajo. Cuando terminé, mis anfitriones me invitaron a comer una paella en un restaurante al que suelen ir en la C/ Serrano. Imagínese… C/ Serrano, en pleno barrio de Salamanca, en el centro de Madrid. Pues bien, sacan la paella para tres personas y lo que nosotros llamamos “socarraet”, para ellos era ‘carbonizado’ y, para colmo, como cubiertos, sacan tenedores y el camarero, que tiene bastante confianza con mis acompañantes me dice que la paella se come con tenedor. Yo me quedé con las ganas de decirle: “A ver, tabernero, tú ni has visto cocinar ni has probado una paella valenciana en tu pxtx vida”… pero, evidentemente, me tuve que contener y simplemente le dije: “soy valenciano y en Valencia la paella la comemos con cuchara”.
Cuento esta anécdota porque creo que con Ripollés pasa lo mismo… si cualquiera puede cocinar arroz con cosas y decir que es paella, cualquiera puede coger un pincel, mancharlo de pintura, dar cuatro pasadas a un lienzo y decir que es pintor. El hábito no hace al monje y aquí estamos ante alguien ya beatificado… Será que como yo soy apóstata me parecen una ‘porquería’ sus pinturas… pero si usted es creyente, todo es cuestión de fe.
Por otra parte, se me hace difícil hacer un paralelismo entre la pintura de Ripollés y su habilidad literaria. Dígolo (como dice don Quijote) porque espero que usted llega a los 92 años (y más), pero que sus novelas no sean para nada identificativas con la pintura ‘ripollesina’. Por un libro de usted sí que merece la pena gastarse gustosamente 20 euros, por un cuadro de Ripollés ni 20 céntimos.
Por otra parte, también entiendo que hay cosas que una persona como usted no pueda expresar en público, pero si estuviéramos en sitios donde los ‘filósofos’ dan sus opiniones libremente, tomando una ‘casalleta’, por ejemplo en un bar, en el Salón de Plenos del Ayuntamiento o en un casal de falla, quizá, podríamos coincidir en opinión.
Y, cambiando de tema, ya que nombra a Machado, no sé si sabrá que hace poco menos de un año se descubrió en los archivos de Burgos un poema inédito suyo, que iba a incluir en Campos de Castilla, pero, por no parecerle lo suficientemente bueno lo deshecho. Se titula ‘Las viejas de Castilla’.
Un día cabalgaba por la ancha carretera
que va de Soria a Burgos, mediada primavera,
por estos altos llanos la primavera tarda
a abrir sus manos rosas sobre la tierra parda.
Y ya es abril mediado cuando el verdor renace,
donde los potros juegan, donde la oveja pace,
[el pescador furtivo apresta sus reteles
y tienen las abejas donde libar sus mieles]*
cuando de blancas flores se cuajan los ciruelos
y la cigüeña madre enseña a los hijuelos
a usar las alas torpes, y al comenzar de mayo,
es blanca todavía la espalda del Moncayo
Y al hombre que trabaja el pegujal tardío
castiga la ventisca y azota el cierzo frío.
Mas sol y azul… Prefiero los yermos de Castilla
a las floridas vegas de Córdoba ó Sevilla.
Saludos.
Don Bernardo, casualmente, el pasado lunes estuve en Madrid por motivos de trabajo. Cuando terminé, mis anfitriones me invitaron a comer una paella en un restaurante al que suelen ir en la C/ Serrano. Imagínese… C/ Serrano, en pleno barrio de Salamanca, en el centro de Madrid. Pues bien, sacan la paella para tres personas y lo que nosotros llamamos “socarraet”, para ellos era ‘carbonizado’ y, para colmo, como cubiertos, sacan tenedores y el camarero, que tiene bastante confianza con mis acompañantes me dice que la paella se come con tenedor. Yo me quedé con las ganas de decirle: “A ver, tabernero, tú ni has visto cocinar ni has probado una paella valenciana en tu pxtx vida”… pero, evidentemente, me tuve que contener y simplemente le dije: “soy valenciano y en Valencia la paella la comemos con cuchara”.
Cuento esta anécdota porque creo que con Ripollés pasa lo mismo… si cualquiera puede cocinar arroz con cosas y decir que es paella, cualquiera puede coger un pincel, mancharlo de pintura, dar cuatro pasadas a un lienzo y decir que es pintor. El hábito no hace al monje y aquí estamos ante alguien ya beatificado… Será que como yo soy apóstata me parecen una ‘porquería’ sus pinturas… pero si usted es creyente, todo es cuestión de fe.
Por otra parte, se me hace difícil hacer un paralelismo entre la pintura de Ripollés y su habilidad literaria. Dígolo (como dice don Quijote) porque espero que usted llega a los 92 años (y más), pero que sus novelas no sean para nada identificativas con la pintura ‘ripollesina’. Por un libro de usted sí que merece la pena gastarse gustosamente 20 euros, por un cuadro de Ripollés ni 20 céntimos.
Por otra parte, también entiendo que hay cosas que una persona como usted no pueda expresar en público, pero si estuviéramos en sitios donde los ‘filósofos’ dan sus opiniones libremente, tomando una ‘casalleta’, por ejemplo en un bar, en el Salón de Plenos del Ayuntamiento o en un casal de falla, quizá, podríamos coincidir en opinión.
Y, cambiando de tema, ya que nombra a Machado, no sé si sabrá que hace poco menos de un año se descubrió en los archivos de Burgos un poema inédito suyo, que iba a incluir en Campos de Castilla, pero, por no parecerle lo suficientemente bueno lo deshecho. Se titula ‘Las viejas de Castilla’.
Un día cabalgaba por la ancha carretera
que va de Soria a Burgos, mediada primavera,
por estos altos llanos la primavera tarda
a abrir sus manos rosas sobre la tierra parda.
Y ya es abril mediado cuando el verdor renace,
donde los potros juegan, donde la oveja pace,
[el pescador furtivo apresta sus reteles
y tienen las abejas donde libar sus mieles]*
cuando de blancas flores se cuajan los ciruelos
y la cigüeña madre enseña a los hijuelos
a usar las alas torpes, y al comenzar de mayo,
es blanca todavía la espalda del Moncayo
Y al hombre que trabaja el pegujal tardío
castiga la ventisca y azota el cierzo frío.
Mas sol y azul… Prefiero los yermos de Castilla
a las floridas vegas de Córdoba ó Sevilla.
Saludos.
Bernat Montagud - 15/02/2024
“Benito”, me consta y agradezco que te cuentes entre mis lectores. Respecto a la anécdota de tu experiencia gastronómica en Madrid en la que la sufrida paella es víctima de tantos engendros, se me ocurren dos, ambas con alumnos de historia del arte valencianos y vascos. La primera aconteció en el museo de Arte Moderno de Barcelona. Enfebrecidos recorríamos las interminables salas. Visitadas las de arte figurativo llegamos a la abstracción. Un alumno me planteó, ¿Esto es arte? Era mi segundo año que impartía clases en el Rey don Jaime y me dejó perplejo. No recuerdo si mi respuesta fue convincente. La segunda, siete cursos después, sucedió en el Museo de Arte Moderno de Madrid con alumnos del Pío Baroja de Irún. Llegados a la sala de arte abstracto contemplábamos unos cuadros de Manuel Viola cuando un alumno me planteó similar cuestión. Circunstancialmente descubrí, el la sala contigua a Viola ojeando unos cuadros. Le rogué que explicase a mis alumnos su procedimiento técnico. No se sí los convenció su credo artístico. Sí que nos fotografiamos todos juntos en las escalinata del museo a los pies de un Gargallo. ¿Es arte cuanto realiza Juan Ripollés? Visionado el vídeo del Seis Doble, que nos permite visitar la exposición en el Museo Municipal, vuelvo a concluir lo que pienso tras haber visitado hace años, en el I.V.A.M. una espectacular antológica de Ripollés a quien Manuel Vicent bautizó con el apodo de “Beato Ripollés” Creo que este alcireño internacional más que pintar, esculpir y modelar lo que hace es un puro divertimiento. Si el cliente compra esas obras, es cosa suya. Vista su trayectoria expositiva parece ser que gusta. A mí también. Me alegran. Benito, en otra ocasión, pues ya me he excedido, te adjuntaré algunos versos de don Antonio Machado escritos en Rocafort antes de su exilio. Un abrazo.
“Benito”, me consta y agradezco que te cuentes entre mis lectores. Respecto a la anécdota de tu experiencia gastronómica en Madrid en la que la sufrida paella es víctima de tantos engendros, se me ocurren dos, ambas con alumnos de historia del arte valencianos y vascos. La primera aconteció en el museo de Arte Moderno de Barcelona. Enfebrecidos recorríamos las interminables salas. Visitadas las de arte figurativo llegamos a la abstracción. Un alumno me planteó, ¿Esto es arte? Era mi segundo año que impartía clases en el Rey don Jaime y me dejó perplejo. No recuerdo si mi respuesta fue convincente. La segunda, siete cursos después, sucedió en el Museo de Arte Moderno de Madrid con alumnos del Pío Baroja de Irún. Llegados a la sala de arte abstracto contemplábamos unos cuadros de Manuel Viola cuando un alumno me planteó similar cuestión. Circunstancialmente descubrí, el la sala contigua a Viola ojeando unos cuadros. Le rogué que explicase a mis alumnos su procedimiento técnico. No se sí los convenció su credo artístico. Sí que nos fotografiamos todos juntos en las escalinata del museo a los pies de un Gargallo. ¿Es arte cuanto realiza Juan Ripollés? Visionado el vídeo del Seis Doble, que nos permite visitar la exposición en el Museo Municipal, vuelvo a concluir lo que pienso tras haber visitado hace años, en el I.V.A.M. una espectacular antológica de Ripollés a quien Manuel Vicent bautizó con el apodo de “Beato Ripollés” Creo que este alcireño internacional más que pintar, esculpir y modelar lo que hace es un puro divertimiento. Si el cliente compra esas obras, es cosa suya. Vista su trayectoria expositiva parece ser que gusta. A mí también. Me alegran. Benito, en otra ocasión, pues ya me he excedido, te adjuntaré algunos versos de don Antonio Machado escritos en Rocafort antes de su exilio. Un abrazo.
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