EL SEIS DOBLE
martes, 17 de octubre de 2023
El desafío de gobernar
Opinión: JAGS
Opinión: JAGS
Si uno no puede con sus votos gobernar está en su perfecto derecho de buscar los pactos que crea necesarios para goberna
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En el panorama político español, la diversidad cultural y las identidades autonómicas se han convertido en temas ineludibles en los debates públicos y en la conformación de gobiernos. Si bien España ha avanzado en términos de descentralización y reconocimiento de la diversidad de sus regiones, todavía, para muchos territorios, es necesario profundizar en la Constitución y en el juego democrático para abordar estos desafíos de manera más efectiva.
Los pactos de gobierno son una herramienta esencial en un sistema democrático, y deben ser forjados dentro del marco democrático con fuerzas políticas que democráticamente han sido aceptadas en elecciones. La diversidad de opiniones y enfoques políticos en España es un hecho, y encontrar consensos para gobernar es una prueba de madurez democrática. Sin embargo, estos pactos deben respetar siempre los principios y valores fundamentales establecidos en la Constitución. ¿Alguien lo duda?
Uno de los aspectos más destacados de nuestra democracia es que para ser Presidente o Presidenta del Gobierno de España, es necesario contar con una mayoría en el Congreso de los Diputados. No debería olvidar nadie, que esta mayoría emana de elecciones democráticas en las que los ciudadanos eligen a sus representantes. Proceso legítimo y esencial para el funcionamiento de una democracia.
Si uno no puede con sus votos gobernar está en su perfecto derecho de buscar los pactos que crea necesarios para gobernar, siempre dentro de los límites legales, y esa búsqueda de una mayoría para gobernar es una práctica democrática inherente a nuestro sistema político, que nadie que esté en el marco político debe olvidar. Cuestionar este proceso es poner en riesgo los fundamentos de nuestra democracia y por lo tanto la defensa de estos principios es crucial para garantizar la fortaleza y la estabilidad de la democracia española.
Obviar que un acuerdo no es válido si no cabe en nuestra Constitución, olvidar queriendo que cualquier decisión o concesión que alguien que opta a gobernar España debe contemplarse o ajustarse a la legalidad, es jugar con dos barajas, y las dos marcadas, y eso parece que está haciendo el Partido Popular.
En este contexto, me surge una pregunta: ¿puede afirmarse que una fuerza política es constitucionalista y democrática cuando pone en tela de juicio que alguien busque la mayoría necesaria para gobernar el país?
JAGS
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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