Desde la Clínica Tecma contamos con un servicio de Oftalmología donde podremos resolver todas las dudas y valorar cada caso. Así, el doctor Pablo Hernández, oftalmólogo en la Clínica Tecma resuelve las cuestiones más recurrentes sobre la conjuntivitis:
¿Cuáles son los síntomas de la conjuntivitis de verano?
Los síntomas de la conjuntivitis son: ojo rojo, lagrimeo, irritación ocular y en ocasiones leve visión borrosa.
¿Por qué aparece?
Aparece por una irritación de la capa más superficial que envuelve al ojo, la conjuntiva.
¿Cómo se detecta?
La conjuntivitis en la mayoría de los casos se detecta con una valoración oftalmológica observando las características de los ojos del paciente a través de un aparato disponible en cualquier consulta básica de oftalmología, la lámpara de hendidura.
¿Cuáles son los más habituales?
En verano las conjuntivitis más habituales son:
- Las conjuntivitis de contacto, son debidas a una irritación por agentes externos como el cloro de las piscinas, abuso de lentes de contacto o exposición al Sol.
- Las conjuntivitis adenovírica, como consecuencia de una infección por un adenovirus que produce una inflamación en la conjuntiva con una duración de varias semanas.
¿Cuándo hay que acudir al médico?
Afortunadamente la conjuntivitis suele tener síntomas leves que se resuelven en unas horas o días, si la causa es una irritación ambiental, o en 1-2 semanas en las conjuntivitis provocadas por el virus. En los casos que los síntomas sean muy intensos o la duración sea superior a una semana, es recomendable realizar una valoración médica.
¿Qué pasa si se emplean remedios caseros?
Como medios caseros podemos aceptar compresas frías para aliviar la posible inflamación, pero cualquier gota o colirio ocular debe tener una garantía de seguridad farmacéutica.
¿Cuáles son los colirios más adecuados?
El tratamiento se fundamenta en hidratación con colirios de lágrima artificial para aliviar la irritación, además en los casos que la inflamación sea muy intensa se puede añadir colirios antiinflamatorios, para siempre con prescripción y control médico.
Y, ¿cuáles son los que no hay que utilizar?
Los corticoides son unos grupos de anti inflamatorios muy potentes, que deben ser utilizados con un control médico ya que pueden tener graves efectos adversos como aumento de tensión intraocular o formación de catarata. Por otro lado, los colirios con antibiótico en ocasiones son empleado por los médicos para prevenir sobreinfecciones por bacterias, pero no modifican la evolución natural de la conjuntivitis ni mejoran los síntomas, en cambio su uso abusivo puede predisponer a resistencias en las infecciones bacterianas.
¿Influye el cloro de las piscinas en la aparición de las conjuntivitis?
Sí. En los casos de contacto directo con los ojos en un formato sin diluir del cloro, como ocurre en ocasiones cuando se manipula durante las tareas de mantenimiento de las piscinas. Puede provocar heridas muy graves en la superficie ocular que deben ser evaluadas de forma urgente por un oftalmólogo.
¿Qué se puede hacer para evitarlas?
Evitar el contacto directo de la superficie ocular con el agua clorada y los gases que puede emanar, para lo cual la medida más efectiva es el uso de gafas de natación.
¿Es bueno emplear lágrimas artificiales?
Las lágrimas artificiales sin conservantes son el tratamiento de primera línea para tratar las irritación oculares, ya que son hidratantes y seguras, al tener una baja incidencia de reacciones medicamentosas adversas.