Opinión: Xavier Cantera
La desigualdad en la vacunación de la población supone llover sobre mojado porque afecta a quienes no tienen alimentos, ni agua ni atención sanitaria
Una opinión más
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Xavier Cantera
En vísperas de celebrar el Día Mundial de la Población, el 11 de julio, con el "objetivo de crear conciencia en relación a todas las problemáticas que afectan a la población del mundo en el crecimiento y desarrollo de los pueblos" y, especialmente, ante la necesidad de vacunar a toda la población cuanto antes", creo que corresponde una reflexión sobre la "población", como "conjunto de personas que habitamos en un determinado lugar, nuestro mundo, nuestra aldea global". Nos interesa que la vacuna llegue a todas las personas humanas, por eso, “desde el comienzo de la pandemia, se ha instado a las naciones ricas a recordar que, después de la experiencia que hemos vivido con el contagio global y de la velocidad con que viajan las distintas cepas del virus, deberíamos vacunar a toda la población aunque solo fuera por egoísmo mundial, ya que "el COVID-19 en un lugar es una amenaza para todas partes". Hasta que la vacuna no llegue a toda la población, seguirán surgiendo nuevos focos de la enfermedad. También por razón de justicia equitativa ya que la OMS revela que solamente el 0.3 por ciento de las dosis disponibles en el planeta han llegado a los países más pobres. Dice un informe de un grupo de ONG, entre ellas Amnistía Internacional, que a pesar de la millonaria aportación de dinero público a las principales vacunas, cerca de 70 países encaran un riesgo grave de disponer, en 2021, de vacunas solo para una de cada diez personas. "Los países ricos, que representan sólo el 14% de la población mundial, han comprado el 53% de las vacunas más prometedoras hasta la fecha". Otra razón para pedir "vacunas para toda la población, es si creemos en la fraternidad universal. Ante la duda, Médicos sin Fronteras advierte que: "Depender de la buena voluntad empresarial o de la caridad en forma de donaciones no es una solución".
La desigualdad en la vacunación de la población supone llover sobre mojado porque afecta a quienes no tienen alimentos, ni agua ni atención sanitaria. Y todo esto, ante la insuficiencia de los programas nacionales de ayuda, acreditada por Oxfam Intermón. No sé en qué estamos pensando los países ricos: el día que se revelen los pobres, no habrán fuerzas suficientes para contener a esta población a la que no nos decidimos ayudar ante la amenaza de muerte por Coronavirus. ¿ Acaso queremos eliminarlos? Nuestro entorno geopolítico algo ha reaccionado para paliar esta injusticia y falta de solidaridad ya que la UE se ha comprometido a contribuir a los esfuerzos para aumentar la producción vacunas y a donar 100 millones de dosis a los países pobres antes de que acabe el año y España se ha comprometido a aportar 125 millones de euros y a donar 7,5 millones de vacunas a América Latina. Algo es algo para que toda la población esté vacunada. Pero hace falta tomar conciencia, como dice mi amigo Ximo García Roca en su último libro "Supervivientes": "La pertenencia a una humanidad, que se considera un pueblo, requiere la cooperación entre iguales que supera la relación benéfica", donde unos son vacunados y otros mueren sin remedio. Se trata de igualdad y justicia.
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Sr. Cantera el primer mandamiento de la Ley de Dios: Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo. Por lo tanto, a ti mismo te tienes que querer mucho, dicho esto sobra toda esa palabrería aburrida, propia de un sermón de los que Ud. ha dado algún que otro, en tiempos pasados. Un saludo
Sr Cantera. Una pregunta. ¿Una máquina de diagnóstico o tratamiento es más eficaz si se adquiere por donaciones privadas que si se adquiere por medio de dotaciones públicas procedentes de impuestos?.
Creo que si es la misma máquina es el mismo resultado. ¿No?.
Lo demás está de más.
Huye Simba, huye y no vuelvas!.. ¿Unas vacaciones en la nave espacial de, Rosa estaría genial?...
Desprotegida, gràcies per fer-me memòria d'una de les etapes més gratificants de la meua vida en Alzira. Com veuràs els meus valors són els mateixos.
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