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Discalculia, cuando las matemáticas se nos atragantanSe estima que entre el 5 % y el 10 % de las personas podrían tener esta discapacidad del aprendizaje en matemáticas
La discalculia es una discapacidad del aprendizaje en matemáticas. Las personas con discalculia tienen dificultades en matemáticas a muchos niveles. A menudo tienen problemas con conceptos importantes, como mayor y menor, por lo tanto pueden tener dificultad para resolver ejercicios sencillos y con conceptos matemáticos más abstractos.
No es tan conocida o entendida como la dislexia. Sin embargo, algunos expertos creen que es igual de común. Eso significa que se estima que entre el 5% y el 10% de las personas podrían tener discalculia.
El diagnóstico de la discalculia debe realizarse mediante pruebas específicas para ello, incluidas en una evaluación neuropsicológica más general. No obstante, hay que tener en cuenta que el diagnóstico sólo debería realizarse a partir de finales de primero de educación primaria (6-7 años), siendo incluso más preciso si se realiza a partir de 2º de educación primaria. El período crítico para el aprendizaje numérico se sitúa entre los 4 y los 7 años, por lo que puede haber diferencias en el ritmo de aprendizaje entre unos niños/as y otros. Pasado este período crítico, si hay dificultades, hay que detectarlas y reeducarlas.
La evaluación debe ir enfocada a valorar todas aquellas funciones que puedan influir en el rendimiento en las pruebas de procesamiento numérico y cálculo, con tal de asegurar que los déficits en el procesamiento numérico y el cálculo no son consecuencia del mal funcionamiento en otra área sino intrínsecamente numéricos.
Las dificultades de las personas con discalculia son diversas. Las señales pueden variar entre las personas, y lucir diferentes según la edad. Podemos indicar algunas señales comunes de la discalculia como son:
Entender el significado de cantidades o conceptos como mayor que /menor que.
Entender que el número 5 es lo mismo que la palabra cinco, es decir, relacionar numero escrito con cantidad física.
Recordar datos matemáticos, como las tablas de multiplicar.
Contar dinero o calcular el cambio.
Calcular el tiempo.
Estimar la velocidad o la distancia.
Ser diagnosticado con discalculia puede sonar aterrador. Sin embargo, para muchas personas es un alivio saber que sus retos con las matemáticas son reales. Además, conseguir los apoyos adecuados puede ayudarlas a salir adelante en la escuela, en el trabajo y en su vida cotidiana.
Fonemes
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