La temporada del Valencia está siendo de las que andan a trompicones y no ofrecen seguridad pero sí emociones
El equipo levantino, que está luchando por el cuarto puesto en la tabla de la Liga Santander, ha perdido una ocasión importante el fin de semana pasado perdiendo en casa contra el Eibar, lo que ha supuesto un freno en la carrera hacia la última posición que otorga la clasificación a la próxima Champions. Sin embargo, la temporada le está ofreciendo otra oportunidad al equipo de Marcelino, y esa oportunidad viene de Europa. Tras haber bajado de la Champions League, el conjunto Che está ahora en las semifinales de la Europa League tras haber impuesto de manera contundente a su vecino Villarreal. Indómito y decidido, el Valencia ha entendido que tiene que apostar mucho sobre la competición continental, cuya victoria le daría acceso a la próxima edición de la Champions. Sin embargo, el camino es todavía largo y lleno de obstáculos.
El primero es el Arsenal, que alojará en su Emirates Stadium la ida de la semifinal del próximo jueves. Los de Unai Emery son candidatos a ganar este partido y la serie, sobre todo porque durante toda la temporada su rendimiento en casa ha sido importante y lleno de victorias contundentes. El Arsenal, de hecho, ha destrozado al Napoli en la ida de los cuartos de final con un 2 a 0 que no ha dejado lugar a dudas. Por este motivo, Marcelino deberá motivar a los suyos para poder hacer un gran partido en Londres, evitando dar demasiada cancha libre a los ingleses, maestros en atacar a través de contras y ráfagas de fútbol directo y rápido. El Valencia, sin embargo, ha demostrado en esta temporada saber aguantar la presión en los estadios ajenos, aunque en el choque del jueves deberá echar mano de toda la experiencia y la habilidad táctica para cerrar los espacios a los ingleses, que querrán conseguir una buena ventaja antes del partido de vuelta en Mestalla, donde se decidirá la eliminatoria.
Con la final de Baku del 29 de mayo en la mira, el equipo Che intentará repetir la gran hazaña de la temporada 2003-04, cuando se impuso en la final de la entonces llamada Copa de la UEFA contra el Marsella bajo el mando de Rafa Benítez, el último entrenador que llevó el Valencia a triunfar también en la Liga. Las grandes esperanzas de Marcelino están repuestas en Gonçalo Guedes, extremo portugués que ha vuelto hace poco a tener el gran rendimiento que todos se esperaban de él. Los otros puntales del equipo levantino son el delantero Rodrigo Moreno, un fijo en las convocaciones de la selección española, y el capitán Dani Parejo, que este año está realizando una temporada espléndida en cuanto a rendimiento. De su inspiración y su forma física dependerá mucho del sueño europeo del Valencia de este año.
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