Artículo de opinión de Xavier Cantera
"Y seguro que incluso saldrán las cerámicas de la polémica para incomodidad de quienes gestionaron "el cambiazo" de forma poco artística"
Un año más, las figuras del Mural Cerámico sobre la Semana Santa de Xavier Claur recuperan su vida y salen a las calles en religiosa procesión, reviviendo y escenificando todos los pasos hacia la Pascua. Y seguro que incluso saldrán las cerámicas de la polémica para incomodidad de quienes gestionaron "el cambiazo" de forma poco artística. Se pueden contemplar las imágenes como siempre o, al observarlas desde el ataque a los derechos humanos que están sufriendo muchos miles de personas humanas en sus propias carnes y en la piel y entrañas de la misma Tierra, casa de todos, podemos ver otras representaciones más actuales pero igual de crueles e injustas.
Podemos ver el paso de las colas en los comedores de caridad y solidarios, el paso de los
5.000 niños que mueren diariamente debido a la insalubridad del agua, el paso de los que están acampados en las fronteras sin poder pasar a vivir más dignamente, el paso de aquellos que son encarcelados por defender la libertad de expresión y de conciencia sin esperanza de un juicio justo, el paso de los que sufren torturas en 102 países del mundo, el paso de quienes son coronadas como reinas de la belleza y maltratadas como mujeres, el paso de quienes son marginados por su orientación sexual, el paso de quienes son asesinados por su religión que han aumentado un 60% en el último año, el paso de los voluntarios solidarios que son perseguidos y ejecutados por su acción humanitaria, el paso de los miles de adultos y niños pobres que cosen ropa bajo la explotación de las multinacionales textiles, el paso de quienes trabajan por sueldos de esclavitud, el paso de quienes son desahuciados de sus casas, el paso de quienes son despedidas o no se les contrata por ser madres, el paso de quienes son ejecutados a manos de bandas rivales por trabajar en hospitales de países en guerra, el paso de quienes sufre enfermedades raras o infecciosas porque las multinacionales farmacéuticas no ven rentable crear medicamentos para ellas, el paso de quienes son maltratadas y asesinadas por la violencia machista o trata de personas, el paso de quienes mueren fuera de su tierra y son sepultados en el mar o en tierra de nadie olvidados de los suyos, el paso de quienes son despreciadas o marginadas con pensiones de miseria como mujeres, viudas y ancianas, el paso de quienes pierden sus tierras a manos de multinacionales destructoras de medio ambiente y el paso de quienes utilizan la religión como instrumento de división o de dominación y no de fraternidad universal.
Al mirar este mural viviente no podemos negar que se trata de una denuncia al sistema neoliberal actual donde el dinero domina todas las decisiones, produciendo tantas víctimas inocentes. Nosotros podemos ser corresponsables de tanto dolor cuando opinamos, votamos, guardamos silencio o miramos hacia otro lado. Ahora hace tres años que fue elegido el Papa Francisco y en su reciente viaje a Ecuador, Bolivia y Paraguay señaló este programa revolucionario: "Ninguna familia sin vivienda, ningún trabajador sin derechos, ningún pueblo sin soberanía, ninguna persona sin dignidad, ningún niño sin infancia, ningún joven sin posibilidades, ningún anciano si una venerable ancianidad”. Demos un paso más, que eso significa Pascua, un paso solidario, de esperanza y de compromiso para que otro mundo más justo sea posible. BONES PASQUES I FELIÇ MONA.
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
Añadir un comentario