Carlet y Alzira: dos ciudades hermanas Artículo de opinión de José Palacios Boquera
“No demoren el hermanamiento de Carlet y Alzira, pues esto es prioritario y, opino, no es necesario mirar las arcas municipales, ya que creo no conlleva gasto público alguno”
Los carletenses celebran las fiestas en honor a sus patronos Bernardo, María y Gracia con una peregrinación el 23 de julio a la Ermita, lugar en donde nacieron tan ilustres hijos de nuestra ciudad hermana. A principios de septiembre celebran las fiestas religiosas, así como las lúdicas, estas últimas organizadas por el Ayuntamiento. En el aspecto religioso he de destacar la gran participación de devotos de los Mártires y Patronos en todos los actos y, más en este año especial, la multitud de carletenses que esperaban con gran fervor la llegada de la nueva imagen peregrina del Pare Sant Bernat.
Fue impresionante, no solo en el puente en donde fue recibida oficialmente la imagen, sino también en las calles y en el templo parroquial en donde D. Vicente, párroco de la Asunción y en presencia de D. César, párroco de San José, bendijo la nueva imagen para, acto seguido, y tras la lectura del acuerdo municipal nombrando a Sant Bernat, Alcalde Perpetuo, la alcaldesa de la ciudad. María Ángeles Crespo Martínez hizo entrega del bastón de mando a la Imagen, corroborando con ello la distinción honorífica otorgada al Patrón de todos los carletenses. Fue un acto sencillo, que siempre se recordará con cariño, repleto de amor y simbolismo, que viene a mostrar, una vez más, que el pueblo de Carlet está volcado con su hijo más ilustre, como se puede palpar, cuando participas y vives con ese pueblo hermano sus fiestas patronales. A pesar de los siglos transcurridos desde su nacimiento (1135) y de su martirio (1180) Sant Bernat i les Germanetes mantienen el fervor y la devoción de carletenses y alcireños, siendo sus mejores intercesores ante Dios, al que en defensa de su fe entregaron sus vidas y hoy todavía son testigos de amor y ejemplo para todos nosotros. La Concelebración Eucarística tuvo tal asistencia de fieles que el templo parroquial fue incapaz de acoger a todos los que anhelaban participar. La lluvia vespertina obligó a suprimir la procesión general, aunque se celebró por el interior del templo. Cordial felicitación a la Presidenta de la Cofradía, Maribel Vanaclocha, alma del gran resurgimiento; a la junta; al igual que a la alcaldesa, María Ángeles Crespo y a su excelente y cordial equipo, por las excelentes iniciativas, colaboración y total disposición por enaltecer a tan ilustres hijos Carlet y Mártires de Alzira.
Las iniciativas pendientes deben tomar fuerza y llevarse a cabo, siendo conscientes de la realidad económica que sufrimos, lo que obliga a los gobernantes y a las asociaciones a estudiar las prioridades por el mejor bienestar de los pueblos. Hay mucha necesidad en muchas personas e incluso en familias y ello debe ser prioritario, no solo por solidaridad, sino por justicia.
No olvidando, ni muchos menos, lo indicado anteriormente con respecto a lo prioritario y que sirva simplemente como recuerdo, para llegado el momento oportuno poder actuar, queda pendiente de realizar la Ruta Bernardina, aunque hay que reconocer que se han dado pasos importantes; la instauración de las imágenes o retablo de nuestros Mártires y Patronos Bernardo, María y Gracia en el altar que la Comunidad Cisterciense ha tenido la delicadeza de dedicar en la Basílica de Santa María de Poblet, detalle que nos debe llenar de honor y orgullo a carletenses y alcireños, tanto cómo que se hermanen oficialmente nuestras dos ciudades, por cuanto carletenses y alcireños ya nos sentimos unidos y hermanados por el Pare Sant Bernat i les Germanetes. No demoren el hermanamiento de Carlet y Alzira, pues esto es prioritario y, opino, no es necesario mirar las arcas municipales, ya que creo no conlleva gasto público alguno. Para concluir y en respuesta, con todo respeto, a alguien que me dice que alabo mucho a los carletenses; debo afirmar que, cuando me encuentro en esa ciudad hermana, me vienen recuerdos de mi niñez y juventud por la familiaridad y sencillez en el trato de las gentes, por su exquisita hospitalidad.
Y claro por el fervor y entusiasmo a nuestros comunes Mártires y Patronos Bernardo, María y Gracia y ello tanto en el clero, autoridades, cofradía, como en toda persona con la que trato. Por razones obvias, me siento muy alcireño y también muy ligado y agradecido a los carletenses.
José Palacios Boquera
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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