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Estampas y recuerdos de Alzira (76)El servicio de recogida de basuras desde sus inicios hasta la actualidad
En algunas viviendas entraban a por la basura y eran recompensados con un gallet o un xavo dels negres
No sabemos si en tiempos anteriores a los años 40 había servicio de recogida de basuras a domicilio. Lo que si recordamos haber visto es que los desperdicios de las casas eran arrojados a las laderas del río que atravesaba la ciudad y también en el brazo muerto del río Júcar, muy cerca del que fue mercado al detalle en la calle Faustino Blasco, lo que hoy es la Plaza del Reino.
A mitad de los años 40, unos carros arrastrados por animales recorrían las calles y el empleado anunciaba su presencia con el sonido característico de una trompeta. Las señoras acudían al carro con su pozal para depositarlo. No existían las bolsas de plástico. Entre otros recordamos a Salvador Cogollos Andrés, que estuvo prestando servicio al Ayuntamiento durante 40 años, y a Rafelet Ferrer y a su hijo, que continuó en esta labor.
En algunas viviendas entraban a por la basura y eran recompensados con un gallet o un xavo dels negres. Durante las navidades, repartían una tarjeta que decía “El basurero le desea Felices Pascuas” y recogían las estrenas.
Del carro al camión
De los carros, a ambos lados, colgaban unos sacos para separar la basura los botes, botellas, el metal o hierro. En otros carros servían unos cajones en la "zorra", es decir, en los bajos del habitáculo. Después eran vaciados en los terrenos que designó el Ayuntamiento en la partida de Tulell, donde hasta 1898 se situaba el antiguo cementerio municipal, muy cerca de la Casa Blava.
Más tarde, el Ayuntamiento, por contrata, lo cedió a una empresa que pasó de los antiguos carros a prestar el servicio con unos modestos camiones que eran conducidos por Bernardo Bernia y los hermanos Furió, Ismael y Enrique. Años después, el servicio lo realizaría una empresa de Tavernes de Valldigna, Vicente Grau, que se la quedó por ocho años. El servicio funcionaba con tres camiones especiales y una furgoneta. Al término de la contrata, sería el propio Ayuntamiento quien acometería este importante servicio que mantuvo tres o cuatro años, siendo el concejal responsable Octavio Daries, hasta que salió a contrata y se la quedó una empresa de la capital de provincia que lo ejecuta en la actualidad.
Los vehículos están situados en el parking municipal. Dos camiones de 14 TM se distribuyen el recorrido, cada uno la mitad de la población. Salen cada noche a las 9:30 y finalizan su servicio hacia las 4 o las 5 de la madrugada. Un tercer vehículo se encarga de recoger la basura depositada en el extrarradio, en los núcleos más habitados, como huertos y chalets. Las dos máquinas de barrer que limpian las calles se encuentran con la dificultad de los vehículos que están estacionados en las mismas. También se cuenta con seis empleados que se encargan de barrer, manualmente las principales calles y plazas.
Estos trabajadores, hace muchos años, cuando estos probos empleados sufrían las inclemencias del tiempo, no disponían del equipo impermeable y calzado adecuado en los días de lluvia. No llegaba el presupuesto para más, se cubrían con unos sacos de plástico para no mojarse. Además sólo percibían 480 pesetas semanales; hoy pasan de los veinte mil duros al mes.
Anecdotario
Cada noche que cubren el servicio salen al paso innumerables anécdotas. Pepe Pepiol, junto con dos empleados más del servicio de limpieza cuenta que en una ocasión encontró un medallón de oro de unos 200 gramos grabada con la imagen de la Virgen de los Desamparados, cuando vaciaba un pozal de una vivienda cercana a la Avenida. A la mañana siguiente se apresuraron a indagar para localizar a su dueña y devolverle el valioso objeto perdido. Como recompensa de este hallazgo percibieron tres "caliqueños".
Otra anécdota que les sucedió a estos tres empleados fue, días más tarde, en una de las calles que desembocan al Camí Nou. Una señora estaba a la puerta de su casa intentándola abrir con unas llaves equivocadas. Había dejado su bolso al lado de la bolsa de la basura y los empleados sin darse cuenta lo recogieron como tal. La señora se dio cuenta tarde puesto que las llaves buenas estaban en el bolso que, además, contenía la importante cantidad de 250.000 pesetas. La señora subió al camión de basura y acompañó a los trabajadores en el recorrido hasta la madrugada y tras descargar la basura con la labor que supuso la búsqueda hallaron la cantidad perdida. Les recompensó con veinte duros.
El hecho más grave se produjo cuando Pepiol y sus compañeros encontraron a un hombre dentro de un contenedor. Era Andrés Martínez, un Policía Municipal jubilado, ya fallecido, —lo recordarán por haberle visto deambular por la ciudad cargado con una maleta y otros enseres— que se había refugiado del frío en este lugar. La casualidad de que escucharan sus gritos por la dificultad que entraña el ruido de la máquina que porta el camión le salvó de morir triturado.
El servicio de recogida de basuras ha crecido y actualmente es diario. A parte de los camiones se han instalado 700 papeleras, 25 contenedores para la recogida de cristal y otros para el cartón y papel que llevan adosada una pequeña cajita para depositar las pilas gastadas.
El Ayuntamiento tiene el proyecto de poner en circulación una motocicleta para recoger los excrementos de los animales. Alzira será todo lo limpia que los alcireños queramos.
Alfonso Rovira, 04.07.1993
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Yo sabía que el antiguo cementerio estaba allí, por la Casa Blava, mi abuelo me lo comentó muchas veces, aunque él no lo conoció. Es curioso pasear por allí o pasar con el coche y pensar que allí habrán antepasados míos.
Señor Rovira ¿Podría indicar, hasta donde hayan datos, cuantos cementerios hubo en Alzira y donde estaban situados? Me pareció leer, hace años, que en el antiguo instituto Rey don Jaime había uno y que por donde está el campo de fútbol de Venecia también. Gracias.
Molt bó rovireta. Gracias, sona interesant lo que pregunta Benito, animo tú puedes, claro despues de la Fira de Xativa
Sí que es buena pregunta la de Benito, porque además de los mencionados, también estaba el mencionado recientemente por el Sr. Rovira en la plaza del Sufragio. ¿Cuantos no?
El servicio d limpieza ya no es lo q era ! Ahora kuando van kon el equipo kompleto q parecen kazafantasmas hacen mas ruido q limpian !!!
El sr Rovira ja va escriure un article al Levante emv a mitat de la decada dels 90 sobre els cementiris que hi han hagut a la nostra ciutat, crec que es titlulava "la ultima morada no es eterna"
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