EL SEIS DOBLE
miércoles, 17 de septiembre de 2014
Ribera TV - Ha passat
Alzira ha presentat les dames de la Mare de Déu del Lluch
Alzira ha presentat les dames de la Mare de Déu del Lluch
També va tindre lloc la presentació de les cinc xiquetes que representen els misteris i que acompanyen la patrona d’Alzira
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Rosa María de Dios - 17/09/2014
La vanidad de las vanidades. ¡Dios no tiene madre ,!Dios es la Madre Divina! Basta ya de fantasías, engañando a los seres humanos, con tales mentiras. Niños muriendo de hambre, y ciertas ideologías, vistiendo a estatuas de baro, con oro, y perlas divinas. Desde niña, me han enseñado a postrarme ante dicha imagen, a adorarla como ser divina. Cuando un día abrí los ojos, que cerrados los tenia,me di cuenta que del engaño a Dios ofendía. Con lágrimas en los ojos y mirando al cielo pedí perdón a Dios, a mi Dios verdadero. No soy culpable, le decía, de haber sido enseñada de tales doctrinas , alejándome de ti verdadera madre Divina. Un vientre materno que nos creo junto a toda la existencia, esa madre que con amor nos regaló, la bella,la sabia, y poderosa naturaleza. Esa es la madre que debemos de amar, adorar,y nuestras rodillas ante ella postrar. Las estatuas son piedra, ellas tienen ojos y muertos no te miran.
Adornándolas con grandes riquezas al pobre mendigo avergüenzan.¡no más engaños! ¡no más mentiras! porque estáis alejando a los hombres de nuestra verdadera madre que nos dio la vida.
Levantad vuestras manos, y con rabia y ira, golpearme por dicha razón, vuestros golpes, vuestras ofensas, las recibiré con amor, si con ello abro los ojos a mis hermanos para que vean en sus corazones al verdadero Dios.
vuestra hermana que os ama en Dios creador
Rosa Maria de Dios
La vanidad de las vanidades. ¡Dios no tiene madre ,!Dios es la Madre Divina! Basta ya de fantasías, engañando a los seres humanos, con tales mentiras. Niños muriendo de hambre, y ciertas ideologías, vistiendo a estatuas de baro, con oro, y perlas divinas. Desde niña, me han enseñado a postrarme ante dicha imagen, a adorarla como ser divina. Cuando un día abrí los ojos, que cerrados los tenia,me di cuenta que del engaño a Dios ofendía. Con lágrimas en los ojos y mirando al cielo pedí perdón a Dios, a mi Dios verdadero. No soy culpable, le decía, de haber sido enseñada de tales doctrinas , alejándome de ti verdadera madre Divina. Un vientre materno que nos creo junto a toda la existencia, esa madre que con amor nos regaló, la bella,la sabia, y poderosa naturaleza. Esa es la madre que debemos de amar, adorar,y nuestras rodillas ante ella postrar. Las estatuas son piedra, ellas tienen ojos y muertos no te miran.
Adornándolas con grandes riquezas al pobre mendigo avergüenzan.¡no más engaños! ¡no más mentiras! porque estáis alejando a los hombres de nuestra verdadera madre que nos dio la vida.
Levantad vuestras manos, y con rabia y ira, golpearme por dicha razón, vuestros golpes, vuestras ofensas, las recibiré con amor, si con ello abro los ojos a mis hermanos para que vean en sus corazones al verdadero Dios.
vuestra hermana que os ama en Dios creador
Rosa Maria de Dios
Benito - 17/09/2014
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agnóstico - 18/09/2014
Por primera vez y sin que sirva de precedente coincido con Rosa Mª de Dios. La utilización del cristianismo para montar fiestas y verbenas, lucir vestidos suntuosos, lujosas joyas bien complementadas con tejas y mantillas, no deja de ser un espectáculo más propio del nacionalcatolicismo de los años de la dictadura que del siglo XXI.
Y todo esto, en plena crisis económica y en el lamentable proceso de desmontaje de la sociedad del bienestar, resulta más bien poco cristiano.
Pero como dice el refrán, "de todo hay en la viña del Señor".
Por primera vez y sin que sirva de precedente coincido con Rosa Mª de Dios. La utilización del cristianismo para montar fiestas y verbenas, lucir vestidos suntuosos, lujosas joyas bien complementadas con tejas y mantillas, no deja de ser un espectáculo más propio del nacionalcatolicismo de los años de la dictadura que del siglo XXI.
Y todo esto, en plena crisis económica y en el lamentable proceso de desmontaje de la sociedad del bienestar, resulta más bien poco cristiano.
Pero como dice el refrán, "de todo hay en la viña del Señor".
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