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Aún se ama al PSOEArtículo de opinión de Xavier Cantera
“Siempre hay esperanzas de recuperar anteriores amantes o votantes”
Una opinión más
Xavier Cantera
Aunque parezca mentira, he constatado, en estos ultimo meses, que hay personas que se interesan por el PSOE, quienes en el fondo aman al PSOE o por los menos no son indiferentes a lo que hace, dice o le pasa a este partido. ¿Por qué digo esta aparente tontería dirán algunos? Por varias razones.
En principio, la gente, los medios de comunicación, no castigan al PSOE con la indiferencia, que es el peor trato, por no ser trato, en el que se puede sumir a una organización ya que se le aísla temporal o definitivamente del esquema mental y emotivo de las personas posibles votantes. Tras esta retirada del círculo de intereses, viene el olvido y su paso a la historia. La indiferencia no despierta ni interés ni afecto. Decía Sigmund Freud “que lo contrario de amor no es el odio sino la indiferencia”. Es un buen síntoma que todo lo que hace o dice el PSOE se comente, para bien o para mal, pero se comente.
Si se comenta críticamente, para resaltar las equivocaciones y las infidelidades, podemos decir aquello de “quien bien te quiere, llorar te hará” ya que el afecto o el sentimiento verdadero exige corregir los errores. El PSOE debe hacer caso y corregir los errores para recuperar a los votantes que le critican ya que en ellos aún queda “el bien querer” y la política actual no es solo ideología sino también sentimientos y emociones. Y no es solo que no nos quieran sino que nos quieren bien y nos quieren mejores, sin perdonarnos ninguna decisión poco reflexionada o nada consultada.
Algo debe estar pasando entre la ciudadanía cuando, en los medios de comunicación, hay muchas voces que hablan más mal del PSOE que del PP que está gobernando. Yo creo que lo que hace el PP era de esperar porque sus decisiones coinciden con sus principios y valores. Pero el PSOE ha decepcionado a muchos de sus votantes, que están dolidos y por eso buscan otros arrimos. Aunque se ha demostrado científicamente que “del amor al odio solo hay un paso” porque ambos sentimientos están en un circuito cerebral compartido, también debemos recordar que en ese circuito, según dicen los científicos, hay una función crítica por la cual, lo experimentos que se hicieron con fotografías de ex amantes o ex parejas dieron buen resultado, pero fracasaron con fotografías de representantes políticos. Por eso referimos votantes críticos que arrastrados por una moda o novedad. Sin embargo, del odio al amor ya no es tan fácil pasar porque, como dicen los expertos, cuando se ama se desactiva una parte de la corteza cerebral, vinculada al juicio y al razonamiento (por eso se dice que el amor es ciego), la cual se enciende a tope cuando se odia. No creo que nadie odie al PSOE si tiene en cuenta los derechos y libertades conseguidos durante sus mandatos. Consultar ¿PSOE = PP? Lo dudo, con datos de Shangay Lily.
Pero también es verdad que siempre hay esperanzas de recuperar anteriores amantes o votantes porque también se dice: “Donde hubo fuego (amor) cenizas quedan” y por tanto, siempre que se consiga emocionar y convencer a las personas con buenas prácticas y se haga todo lo posible por cambiar, la organización, como el “ave fénix” que debe morir a toda traición e indefinición para revivir de sus cenizas pero sin desplumarse de sus principios y valores, lo cual, nos convertiría en un pajarraco irreconocible.
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Dicen que quien no tiene nada que decir y, pese a todo, siente la obligación de decir algo, acaba por decir tonterías. Creo que lo dijo "Clarín". Pues sí, Sr. Cantera, año tras año, aquí y allá, sin que se apiade de nosotros y nos dé una tregua, tenemos que aguantar sus obviedades, sus simplezas, su egolatría disfrazada de buenismo, sus razonamientos infantiles, su espantosa sintaxis, sus fusilamientos gramaticales. Ahora ya lo tengo claro. Por fin. Perdóneme por no haberme dado cuenta antes, qué torpeza la mía, qué ciego he estado: usted es un troll.
Emmanuel, es cierto que no soy un buen articulista, que cometo muchas faltas a la hora de redactar mis artículos, que debo cuidar más mis notas y, le prometo, que voy a aplicarme más en esta tarea. Por otra parte, quiero asegurarle que no tengo obligación de nada, que son colaboraciones voluntarias y puntos de vista que, como otras, pueden parecer bien o mal pero no son de lectura obligada. En cuanto a la interpretación psicológica que hace de mi interés por colaborar en el Seis Doble, le rogaría que, habiendo acertado en el diagnóstico, tenga la amabilidad de concederme una entrevista en su consulta privada para confirmarle que, además de no ser buenísimo, no soy tampoco un troll que va provocando a los lectores. Siento mucho que haya tardado tanto tiempo en darse cuenta de mi farsa pero aún podría descubrirle más sorpresas si tuviera el gusto de tomar un café con usted ¿Tiene algún inconveniente en conocernos personalmente? Mire si soy buena persona que estaría dispuesto a enviarle mis notas antes de publicarlas para su corrección tanto sintáctica, gramatical como en cuanto a la profundidad de su contenido. Espero conseguir esa entrevista con usted para comprobar que quiere ayudarme y no ofenderme desde el anonimato. Espero su respuesta.
¿Enviarme sus escritos para que yo los corrija? ¿Qué pretende, hombre de Dios? ¿Matarme? No creo merecer, por un simple comentario, castigo tan atroz.
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