

Artículo de opinión de Xavier Cantera
“Sus toneladas nos pesan igual que la carga injusta de la estafa global”

Una opinión más
Dicen que es un monumento al tambor, pero contemplándolo con calma y viendo su diseño, su color y su figura recortada en aquella rotonda, más parece, por su silencio, su austeridad y la ausencia de accesorios, un monumento al tambor de la crisis que estamos sufriendo, sobre todo, los currantes.
La austeridad de sus líneas está conforme con la pobreza del penitente que parece surgir, encapuchado, por encima del tambor. Sin adornos, sin complementos indicativos de un consumo caprichoso. La austeridad rígida de sus líneas no invita a acariciarlo con la mirada. Más bien lacera el alma al contemplarlo con la misma dureza con que nos castigan los recortes. Sus baquetas varadas están sobre un instrumento callado, silente, mudo por no gastar ni material ni esfuerzo humano. No hay manos que lo redoblen invitando a salir a la calle ni una maza que lo marque con golpe ensangrentado. Su color oscuro y sufrido no necesita gastos de mantenimiento pero resulta muy difícil convertirlo en verde esperanza. Su tono hace que la vista choque contra él y regrese a nuestros ojos con pesimismo. Su material es frío, escuetamente justo y propio para soportar la crudeza de la intemperie. En un solo instrumento y en su sonido metálico se resumen todas las tonalidades, sin dar ocasión a las diferencias y a la diversidad de matices. Este monumento nos recuerda que, después de una noche de botellón especulativo, de orgía de consumo, de timbas con burbujas inmobiliarias, de reservados con hipotecas tóxicas de unos cuantos, viene el paro de los despedidos, el abandono de las herramientas, el silencio de las empresas, los recortes de lo humano y la oscuridad del futuro. Sus toneladas nos pesan igual que la carga injusta de la estafa global.
Quedará para la posteridad. Está en el lugar adecuado, donde se organiza la Procesión del Viernes Santo. No está mal que un monumento a los tambores de la Semana Santa adornado con los rasgos del silencio, la austeridad, la frialdad y la oscuridad nos recuerde, siempre, la crisis que estamos padeciendo o la estafa que nos han impuesto aquellos que viven rodeados del ruido de los mercados, con la abundancia de las pensiones blindadas, en el calor de los paraísos fiscales y con la luz de televisiones amañadas. Los cofrades, antes de desfilar en la procesión penitencial, endulzada con caramelos, les contarán a sus hijos que este monumento se plantó allí, durante una ‘Tamborrada Nacional’, cuando sus padres y sus abuelos estaban sufriendo el mayor atraco económico y social que recuerdan. Espero que lo cuenten en pasado, querrá decir que los tambores de la Semana Santa de Alzira habrán seguido sonando sin cesar haciendo memoria de Aquel que defendió, de palabra y de obra, la justicia, la igualdad y la fraternidad de todas las personas.
Que resuenen muy fuerte en las calles pues hay dirigentes que aún no se han enterado del sufrimiento de la gente. Que este monumento sea como el “Tambor del niño de Bruch”, que espantó a los enemigos del pueblo con sus redobles, amplificados por el eco de las montañas.
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Estupendo articulo Xavier
Xavier, no he conseguido poder hablar contigo por telf., como amigo y compañero durante muchos años del Padre Vicente, te solicitaría una nota de prensa y/o reflexión relacionada con lo que él entendía por - TEOLOGÍA DE LA ALIMENTACIÓN -. ¿Es posible?,... gracias.
Este tambor no anuncia el despertar de un pueblo, solo nos describe el aborregamiento de una sociedad, llenar de ruido las cabezas para evitar que puedan pensar, llenar los estomagos de alcohol para embotar sus conciencias, golpear inmisericordemente el tambor para evitar que golpeen a los que les estan robando el futuro.
Tal vez sea mejor asi, demosles tambores, alcohol barato, tracas, fallas, procesiones........, dejemos que se desfoguen, evitemos que piensen. No nos quejemos del olor a orin y vomitos de nuestras calles, del ruido que nos impide descansar, del humo nocivo de las fallas, de las procesiones que cortan y llenan de cera nuestras calles, es un mal menor, evitemos que piensen, si piensan sera peor, los golpeados no seran los tambores, el alcohol se usara en cocteles, los disparos no seran de tracas, lo que se encendera no seran monigotes de carton, las filas de penitentes seran filas de presos.
¡VIVA EL TAMBOR!
Bon article Xavier, i bona la descripció que en fas del "monument": "La austeridad rígida de sus líneas no invita a acariciarlo con la mirada." I tant que no!
Per cert, ahir mateix passí caminant per la seva vora i vaig sentir dos xiquets que raonaven sobre el que representa el "monument". Un dels dos afirmava que en realitat es tracta d'un despertador i que marca les set menys quart. Pense que aquest esdeve un nom ben posat: "la rotonda de les set menys quart".
I és que no hi ha res com la saviesa dels infants.
Salutacions
Si Señor, bellisimo el articulo. Enhorabuena.
Cuando en un país nos obligan a cerrar fabricas , a vender las grandes empresas del estado , a importar todo tipo de productos fabricados en esclavitud,explotando niños sin derechos sociales,con un millos de políticos y asesores ,ese país esta condenado a la ruina, ruina que se financia a muy buenos intereses que pagamos a los mismos que nos han obligado a hundirnos en la pura y dura miseria .
Los pasos siguientes de estos saqueadores ,son la sanidad privada,la educación,las jubilaciones ,la seguridad,la privatización de muchas funciones publicas
cobro de impuestos tramitaciones de todo tipo, todo lo que constituya una forma de negocio sera privatizado,la ciudadanía tiene que pensar lo que está pasando para no dejar a nuestros hijos y nietos un estado destruido donde el ciudadano solo sera una forma de negocio.
http://www.youtube.com/watch?v=EcQ1pMciuCg
El artículo me parece maravilloso y poético y agrio como nuestra sociedad dormida que va avotar a los de siempre porque se dejan engañar como siempre y lo que se rien ellos de nosotros cada día ¡ESO NO TIENE PRECIO!
En conclusión, que no le gusta el monumento y tiene que escribir un articulo dando recursos poéticos "politiqueados" y palabras cultas, para hacer sentir tonto al que ha aportado un poco de dinamismo a esta ciudad y no me refiero a los políticos....
Primero decir que este monumento sale del bolsillo de los tambores de Alzira y no de las personas de a pie como cree todo el mundo, pues se han esforzado mucho en realizar actos y otro tipo de actividades para poder pagarlo.
Creéis realmente que son personas incultas¿? por tocar un tambor o tener pasión por cualquier fiesta¿?
Sois un poco imparciales y poco flexibles, ya que, relacionáis a un monumento con la política....
Que este monumento recordara a la crisis vivida¿?¿?¿? estamos locos?
Lo que recordara la crisis sera la mala gestión de nuestros recursos, por parte de todos los políticos tanto de un bando como de los otros, los que se embolsan el dinero y se ríen de nosotros cada día, que deberían opositar como los jueces o los notarios y hablar los 5 idiomas con nivel perfecto, antes de entrar a gobernar nada, puesto que son un poco mas incompetentes que cualquier estudiante de universidad de hoy en día.
No seamos tan especiales y quejicas que a quien realmente hay que decir estas palabras son a los que nos gobiernan, no a nuestros iguales.
No escribes ningún articulo de opinión, sobre el despilfarro en la estación de autobuses de Alzira? eso ha costado mas duros a la gente que el monumento...y dicen que es precioso!!!
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