Hoy… Juan Ignacio Calabro
“Todas las personas pueden tener un sitio en un equipo de rugby”
El Seis Doble nos acerca a todos los jugadores que forman parte del Rugby Club Alzira en una serie de entrevistas que se irán publicando a lo largo de toda la temporada.
Soy de Argentina.
Llegue en agosto de 2002. Vine con mi familia a visitar a mi suegro, nos gustó y Argentina no pasaba un buen momento decidimos quedarnos y aquí seguimos.
Sí, siempre fui muy deportista y el rugby fue siempre mi prioridad.
En octubre cumplí cuarenta años. Comencé a jugar con ocho años; se podría decir que hace treinta y dos que juego. He tenido periodos de más o menos actividad, pero siempre he estado ligado a este deporte.
En este momento estoy desempleado, pero ayudo en una clínica veterinaria que posee mi mujer.
Sólo una cosa tuve clara al llegar a España y era conseguir un equipo de rugby lo más rápido posible, porque era la forma más rápida de conocer gente en este nuevo país.
Fue increíble entrar en la ciudad y pasar al lado de una campo de rugby, como era el viejo campo de Tulell. La verdad es que tuve mucha suerte por no tener que trasladarme mucho para poder jugar.
¿Eres consciente de que el rugby es un deporte minoritario? ¿Por qué juegas al rugby?
En realidad no es un deporte minoritario, lo es en este país porque la mayoría de los recursos disponibles para deporte se destinan al único deporte popular conocido, el fútbol. En otros países no resulta minoritario, es más, hay países donde la afición por este deporte se asemeja a la del fútbol en España.
Hace unas semanas, con unos amigos, fui a ver un partido internacional al Estadio Olímpico de Roma donde concurrieron 75.000 personas; creo que hay pocos partidos de fútbol aquí que despierten tal afición.
Juego a rugby porque desde que empecé me gusto, es un deporte muy completo, se utilizan las manos, los pies, es sencillo de entender y, lo más importante, la camaradería y amistad que se forjan al formar parte de un equipo de rugby es difícil que se pueda conseguir en ningún otro deporte.
¿Qué cualidades o condición física tiene que tener una persona para la práctica de este deporte?
Solamente tener ganas. Todas las personas pueden tener un sitio en un equipo de rugby. Según la posición que se ocupe no hace falta ser alto, bajo, gordo o rápido; un equipo se nutre de las características que cada persona puede ofrecer al equipo y aprovecharlas de la mejor manera. Hace falta gente fuerte, inteligente, ágil, rápida, estrategas, habilidosos, laboriosos… con alguna o con varias de estas características se puede jugar y divertirse en este deporte.
De ninguna manera. El problema es que es un deporte de contacto y a veces la gente que no está preparada psicológicamente para entender este juego confunde los lances del partido con agresiones hacia su persona y se malinterpreta como una agresión. Esto, por lo general, trae aparejado que se califique erróneamente este deporte.
Este es un deporte muy amateur, ¿te gustaría haber jugado en un equipo de categoría superior o sólo juegas por afición?
He jugado en Argentina en equipos de máxima categoría, pero lamentablemente amateurs; a eso he llegado tarde porque el profesionalismo empieza ahora a tomar forma en Argentina y, lamentablemente, ya estoy un poco mayor como para jugar a ese nivel, pero me hubiera gustado mucho haber podido jugar profesionalmente.
¿En qué demarcación juegas? ¿Qué cualidades tienes que tener para jugar en ese sitio?
En toda mi carrera deportiva he ocupado en casi todos los puestos disponible en un equipo de rugby, pero donde más he jugado y, a mi entender, más divertido de todos es el de ‘1/2 melé’.
Es un puesto nexo entre las dos partes del equipo, los delanteros y la línea. Este puesto es el responsable de la estrategia de juego y las decisiones tácticas en cada sector y situación del juego.
¿Consideras que tienes suficiente ‘cultura rugbystica’ para disfrutar aún más de este deporte?
Por supuesto. Realmente no hace falta entender mucho para disfrutar de este deporte; siempre se puede aprender y mejorar pero, como dije antes, si uno tiene ganas de jugar el deporte en sí es simple.
¿Crees que todo vale para ganar o hay que tener un código de ‘honor’ que no hay que traspasar?
Creo férreamente en el código de honor que se debe transmitir desde los entrenadores hacia los jugadores. Creo que todo vale pero dentro de la legalidad y reglas del juego. De hecho, los mejores equipos y en los grandes partidos se juega un rugby de mucho contacto, pero rara vez se ven jugadas con mala intención, sólo jugadas aisladas y los grandes equipos no necesitan de estas prácticas para realizar grandes partidos.
Como en todos los deportes, la figura del árbitro es muy cuestionada. Yo suelo decir a mis compañeros que la figura arbitral es necesaria para mantener un orden, pero que la disciplina debe empezar por el equipo; el árbitro sólo está para marcar jugadas dudosas o para aplicar las reglas pero, ante todo, un equipo debe conocer estas reglas y evitar que el árbitro obtenga un protagonismo que debería estar reservado a los jugadores.
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