Por: Antonio Caballero
“Un ambiente retro no tiene porque estar inspirado en una época concreta”
Nada mejor para describir el estilo retro que comprender su significado y definición.
Retro es igual a retroceso, retroceder en el tiempo es su definición latina, por eso la estética retro se basa en los movimientos artísticos de los años 30 a 60 a diferencia de ‘vintage’, el estilo retro se inspira en objetos, muebles, moda, etc. de los años de la posguerra mundial para fabricar de nuevo imitando los artículos postmodernos. La tendencia ‘vintage’ lo que hace es recuperar; lo retro se inspira y fabrica de nuevo, lo retro sería que un bolso de hace 40 años o cualquier artículo diseñaras de nuevo inspirando en el pasado.
Vintage = recuperar, conservar y restaurar.
Retro = recuperar, inspirar y rediseñar.
Cualquier elemento de una cultura o moda occidental pasada nos servirá para crear un objeto retro… siempre y cuando esta propuesta este contextualizada en la sociedad actual. Estos elementos decorativos evocan el pasado, apelan a la nostalgia y a los recuerdos, por lo tanto ideal para crear una atmosfera acorde a nosotros mismos. Lo retro transmite optimismo (tan necesario actualmente), es divertido, colorido y creativo.
Al término de la II Guerra Mundial se apoderó de la sociedad una nueva esperanza en el futuro, hiperactividad, optimismo y felicidad acabarían contagiando todos los ámbitos de la vida. Este renacer se trasladó también al mundo de las artes decorativas y la decoración; atrás quedó el sufrimiento y la decadencia occidental, tocaba entonces levantarse, crear y vivir.
Pósters de películas, fotos de actores y actrices, alfombras de pelo largo, lámparas redondas y de colores, sillas de cromo, papeles pintados con formas geométricas círculos o rectángulos, colores chillones y alegres en los esmaltados, tapizados, alfombras y los empapelados,
Para crear nuestro ambiente retro se requiere que en la estancia predominen en las paredes tonalidades amarillas, naranja, turquesa-fucsia, verde-lima, marrón, negro, blanco… en definitiva un estallido de color y en contraste con el amueblamiento; por ejemplo, si tenemos un aparador sesentero de madera clara la pared en contraste color turquesa oscuro siempre presente el estallido de color.
Atrévete e incorpora cosas antiguas y divertidas, no debes recargar la estancia en exceso, lo retro puede ser combinable con muebles antiguos y cortinas modernas, al igual que los tapizados y elementos minimalistas. Un ambiente retro no tiene porque estar, necesariamente, todo inspirado en una época concreta, el eclecticismo es lo ideal en la decoración.
En el mobiliario destacan las formas curvilíneas, los complementos circulares, el mueble de inspiración danesa de los 50 y 60 es el perfecto, elementos de acero inoxidable, junto a transistores, televisores y frigoríficos de inspiración americana son complementos adecuados a nuestro nuevo look. Cuadros, cojines en el sofá, sillones, camas respetando los colores de las gamas retro nos adentrarán en nuestro nuevo mundo. El acabado perfecto a un nuevo hogar y ¿por qué no? a una nueva filosofía de vida.
Antonio Caballero Bataller
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