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Estampas y recuerdos de Alzira (171)Constructor de ilusiones
Juan Guardiola, uno de los mejores arquitectos que pasó por esta ciudad
Juan Guardiola Martínez era conocido mayormente por los alcireños como empresario de los cines Giner, Cervantes y más tarde el Gran Teatro. Pero el Sr. Guardiola, que era un hombre de trato afable y jovial, fue uno de los mejores arquitectos que pasó por esta ciudad.
Nació en Sueca el 17 de Septiembre de 1895, el año pasado hubiera cumplido cien años, fue un alcireño más. Llegó a Alzira, un poco más arriba del curso del río que también pasa por la ciudad que le vio nacer, allá por la mitad de la década de los años 30 y en la legislatura del alcalde Francisco Oliver fue arquitecto municipal interino. En el tiempo de sus primeros años de estancia en Alzira realizó diversos proyectos de obras como la casa de Correos y Telégrafos, que no llegó a terminarse por motivos de haber dado comienzo la Guerra Civil, continuando la obra a principios de los 60 en que se trasladaron las dos oficinas de Correos y Telecomunicación ubicadas en la Plaza de Santa Catalina, donde se sitúan en la actualidad. En 1937 proyectó el lavadero municipal de l’Alquerieta, que inauguraría el alcalde Oliver existiendo la anécdota de que no había licitador para la subasta de la obra, ya que los constructores se hallaban en la guerra, teniendo que hacerse cargo la Administración y además como no había cemento ni hierro para emprenderla lo tuvieron que pedir a la Ministerio de la Guerra.
La realización del arquitecto Guardiola que más recordamos los alcireños fue el teatro de verano Casablanca, que fue inaugurado el 30 de agosto de 1945 y desaparecido, lamentablemente, por la invasión urbana del cemento y el hierro, en febrero de 1976. Pero el bien hacer de Guardiola no terminó aquí; también construiría otro teatro de verano similar en Villanueva de Castellón, el California, y otro en Alcoy; edificios como el almacén de Pascual Capella, al mismo lado del desaparecido Matadero Municipal, cercano a la Estación de ferrocarril; viviendas en la Plaza Mayor, como la de Bernardo Rosell; el Banco Hispano y su propia casa y su obra más grande en Alzira, las viviendas unifamiliares para productores de Cartonajes Suñer de la que les contaremos la fiesta del día de la inauguración oficial.
Era el 1 de diciembre de 1960, cuando se acercó hasta Alzira el Ministro de la Vivienda José María Martínez Sanchez-Arjona, a quien recibieron el alcalde Bernardo Andrés Bono; capitán de la Guardia Civil, José Valhondo Paredes y el arcipreste, Francisco Albiol Bañón.
La primera visita que realizo el ministro a su llegada a Alzira fue a la Cooperativa de Viviendas de los Santos Patronos, de las que se habían construido 50, que ya estaban ocupadas por sus propietarios. Pocos minutos después llegaría la comitiva a la factoría de Cartonajes Suñer, donde a la puerta fueron recibidos por los hermanos Suñer; José, Luis, Alfredo y Rafael. Allí se encontraba también la Fallera Mayor de Alzira Pepita Pellicer Zozaya, con la Junta Local Fallera. La Banda Ateneo Musical de Cullera interpretó el himno nacional pasando después el ilustre visitante al hall de la fábrica donde depositó una corona ante el monumento de José Suñer y Ana Sanchis, fundadores de la empresa alcireña. A continuación se dirigieron a la plaza principal de la barriada, donde le fue mostrada al ministro una de las viviendas recién construidas y ya ocupadas por los productores siendo la de Antonio Caballer la que visitó el ministro.
En un estrado levantado al centro de la plaza del complejo residencial se procedió primero a la bendición, acto que llevó a cabo el párroco de la Virgen de Lluch, reverendo Joaquín Nadal Steinfelder. Dio comienzo la inauguración oficial tomando la palabra el empresario alcireño Luis Suñer, promotor de la obra que se había terminado manifestando, entre otras cosas, que los nombres que se habían dado a la plaza y calles -
Ana Sanchis, José Suñer Orovig y Artes Gráficas- había sido en homenaje a los productores de Cartonajes. A continuación hizo uso de la palabra, en nombre de los trabajadores, Agustín Oliver, terminado el ministro quien a continuación hizo la entrega simbólica de las llaves de las viviendas a los nuevos propietarios disparándose, como es costumbre en estas tierras, unas tracas. Después la comitiva de visitantes y acompañantes recorrieron las instalaciones de la nueva granja Avidesa en Montealegre, donde Luis Suñer recibió los mejores elogios.
Las viviendas de la Colonia Ana Sanchis fueron construidas por motivo de la legislación emanada del Estado, por el que las empresas con más de 50 obreros fueran construidas viviendas para los mismos. A Cartonajes le correspondían 45, pero Luis Suñer, viendo la imperiosa necesidad, amplió el proyecto hasta cien viviendas unifamiliares.
El proyectista y arquitecto de la obra, Juan Guardiola Martínez, fallecería dos años más tarde, el 24 de Diciembre de 1962, siendo el alcireño a quien más luto se le guardó, ya que los cines de la ciudad, de los cuales era el empresario, estuvieron cerrados en las navidades de aquel año.
Queda, eso sí, la muestra de sus buenas obras, aquí en Alzira, en Sueca y algún emblemático edificio en Valencia y también en Barcelona.
Alfonso Rovira 26.01.1996
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