Poema de María Fernández
Lugar de encuentro
Por: María Fernández
¿Hay en el mundo dignidad mayor,
honor más grande
para las razas animal y humana
que la augusta potencia de ser madre?
¿Y por qué habrán de parir entre dolores
si es hermoso dar vida...
y si las hembras no parieran
la especie acabaría?
Al ver hoy dar a luz a las mamás
yo recuerdo a la mía:
trabajadora, alegre y ocurrente,
amable y muy sufrida.
Siendo muy joven tuvo
a su primer retoño, era una hija;
y ¿quién la llevó flores
a aquella humilde alcoba en que paría?
¿Qué clínica lujosa
arropó a los demás hijos que nacían?
¿Quién palió sus dolores?
¿Cómo aplacaba el llanto
la cuna que mecía?
Ella no descansaba;
ella apenas dormía...
la sed o el llanto de sus hijos
eran su primacía...
Vigilante y atenta la encontraba
el alba al despuntar el día.
¿Y alguien puso una rosa entre sus manos
cada vez que paría?
¿Quién la felicitaba
por tanta valentía?
¿Quién besaba las manos que lavaban
en una presa fría?
Y cuando de la madre se celebraba el día,
¿alguien se preocupaba
de darle una sorpresa de alegría?
Quizá sólo unas lágrimas la hicieran compañía,
y unos cuantos pequeños en su entorno,
que jugaban, trasteaban y reían,
y no se daban cuenta
si la madre gozaba o si sufría.
Con tus noventa y cinco años, madre,
somos tus flores vivas;
de aquellos siete hijos que criaste,
estos seis que viven todavía;
el que ya está en el cielo,
a la vez que nosotros, madrecita,
con abrazo filial y agradecido,
por ser madre, también te felicita.
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
No dejo de sorprenderme cuando leo tus poemas, el ingenio que tienes es mucho, te salen las palabras de dentro de tu corazon. Imagino que la señora estupenda que te acompaña en la fotografia es tu madre... si tiene noventa y cinco años muchisimas felicidades porque se ve estupenda, ya quisiera yo estar asi cuando tenga unos 70.
Debe dar gusto pertenecer a una familia tan grande, al menos aunque no te regalen flores ni joyas, nunca faltaran esos besos que tanto nos gustan a las madres, si son acompañados de un abrazo..... ni te cuento la felicidad tan inmensa que se siente.
Un abrazo y un beso para ti, que aunque no hayas tenido hijos, si has compartido tu vida con muchisimos niños que bien seguro es, te habran alegrado tambien en muchos momentos.
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