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Cartas al directorEl copago de los medicamentos no soluciona el problema sino que crea nuevos
“Seamos críticos, investiguemos, analicemos y no nos creamos a pies juntillas lo que el Gobierno nos quiere encasquetar por decretazo”
El otro día surgió en medio de una conversación el tema del copago de la Sanidad que el Gobierno quiere aprobar por decretazo, puesto que somos el segundo país que más medicamentos desperdicia. Pues uno de los contertulios (como otros tantos que habrá por todo el país) estaba totalmente convencido por el mensaje que están transmitiendo los políticos y que viene a decir que los responsables de este despilfarro somos los usuarios de la Seguridad Social.
Vamos a ver: ¿Por qué soy yo responsable de tirar a la basura tan gran cantidad de medicamentos? ¿Acaso, los que ahora vamos a pagar, somos los responsables del envasado, de la receta o de que el farmacéutico nos endose la gran cantidad de pastillas innecesarias que luego vamos a acabar tirando a la basura? En lugar de hacernos pagar los medicamentos que se desperdician, ¿por qué no presionan a las farmacéuticas para que acondicionen el envasado de los medicamentos a la duración de los tratamientos?
Por ejemplo: un simple resfriado tiene un tratamiento medio de tres o cuatro días (como máximo, una semana) utilizando un par de comprimidos diarios, ¿alguien se ha preguntado por qué en las cajas de los medicamentos hay más del doble, y a veces el triple, de pastillas necesarias para el tratamiento? Cantidad excesiva que acaba siempre en la basura. ¿No sería más normal y económico empezar porque las farmacéuticas vendieran (y por consiguiente sólo cobraran) la cantidad necesaria estipulada para el tratamiento? Y ustedes me dirán: “Sí, esto es muy bonito, pero y si no es suficiente para curarme del todo, ¿entonces qué?”. Pues en ese caso debe usted acudir de nuevo a la consulta, porque es el médico el que debe valorar de nuevo su estado y volver a recetarle otra dosis si fuese necesario. Ahora bien, por lo general suelen cambiar el medicamento por otro más potente o más acorde que el anterior.
Y con los crónicos se están cebando y nos están tomando el pelo de todas-todas, ya que es el único colectivo que no tira medicamento alguno a la basura. A los crónicos, hasta que no ha transcurrido el tiempo para el cual se le han recetado los medicamentos no pueden recetarles más, ya que el sistema informático que utiliza la S.S. no permite repetir recetas para un mismo periodo y, además, verifica si la receta ha llegado a alguna farmacia (imposible adquirir dos veces los mismos medicamentos). Es decir, que cuando la receta se ha imprimido, ya no se puede volver a expedir ningún duplicado o copia aunque al enfermo se le haya extraviado o deteriorado. Luego tenemos a los que prefieren auto-medicarse (cosa que nunca hay que hacer, pero ellos sabrán porque juegan con su salud), que cuando van a la farmacia pagan el cien por cien del precio del medicamento, ya que no hay receta médica. Por lo tanto, este colectivo no le cuesta ni un céntimo a la S.S.
Resumiendo: ¿por qué vamos a pagar, los usuarios, un dinero que las farmacéuticas están robando a la Seguridad Social envasando una cantidad inadecuada y desorbitada de medicamento para el tratamiento recetado por el médico? ¿No sería más responsable, serio, eficaz, y lógico (para reducir el gasto sanitario), que el Gobierno obligara a los laboratorios a modificar y adecuar el formato del envasado a las cantidades recomendadas por los facultativos médicos (que al fin y al cabo son los que saben cuál es el medicamento y la cantidad necesaria para el tratamiento de cada dolencia)? Puestos a investigar, ¿por qué los señores inspectores de la Seguridad Social no levantan el culo (ese que se les ha quedado cuadrado) de sus sillas e intentan ganarse el sueldo cumpliendo con su cometido y averiguan porque, por ejemplo, llega a ocurrir en este país que un facultativo recete a un señor de 79 años unas pastillas anticonceptivas y, para más inri, en reiteradas ocasiones? Claro que, ¿cómo se van a atrever estos políticos a enfrentarse a los potentes laboratorios y defender a los pobres consumidores que les han votado para que velen por sus pobres intereses? Para eso habría que perseguir y castigar como es debido a esos (gracias que son pocos) médicos irresponsables y corruptos que avergüenzan al resto del gremio de profesionales de la medicina. Un grupo que sufre la supresión de puestos de trabajo, recortes en sus salarios y masificación de sus consultas. Es más fácil hacer que paguemos nosotros por decretazo que ponerse a trabajar para ganarse lo que cobran y enemistarse con los poderes económicos.
Muy bien, preguntas y más preguntas pero… es fácil acusar y no aportar soluciones. ¿Cómo se soluciona esto? Muy fácil: a la antigua usanza. Antes el médico recetaba la posología del medicamento y la cantidad que el farmacéutico (alquimista y químico) debía preparar y entregar al enfermo. Se puede utilizar el mismo procedimiento, pero modernizado, si los laboratorios entregasen a las farmacias el medicamento “a granel” y que el farmacéutico envasase la cantidad prescrita por el médico en la receta. Con esto problema solucionado.
No, no es un invento mío. Ya se está utilizando y desde hace mucho tiempo en Estados Unidos. Sólo es cuestión de buscar y de coger lo que nos interese de todo lo que existe repartido por este ancho mundo.
Según mi punto de vista, el copago va a causar más problemas de los que va a resolver y, por de pronto, a los que más perjudicará será a nuestro mayores. Todos ellos afectados por dolencias crónicas y graves (de movilidad, mentales, renales, arteriales, intestinales, cardiovasculares, respiratorias,…), para las cuales se utilizan desgraciadamente los medicamentos más caros. ¡Ah! y para colmo resulta que son los que dependen, desgraciadamente, de los ingresos más bajos.
Por favor, seamos críticos, investiguemos, analicemos y no nos creamos a pies juntillas lo que el Gobierno nos quiere encasquetar por decretazo para sacarnos los cuartos y regalarlo descarada y alegremente a esos laboratorios farmacológicos que son los primeros, verdaderos y mayores responsables del desmesurado gasto farmacéutico de la seguridad social.
JALL
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Ante todo, JALL, buen artículo. Me ha gustado la forma de tratar el tema, desgranando problemas y proponiendo soluciones, no yendo (como hacen otros) al insulto fácil al político. Ahora vayamos por partes. Dices que la principal causante del desperdicio de fármacos son las empresas farmacéuticas, y estoy totalmente de acuerdo. Llevan años y años ganando un pastizal con técnicas digamos "dudosas" ante la pasividad de la administración. Ahora bien, entre las medidas que ha propuesto el Gobierno en su reforma, hay una que no la dicen en los periódicos, ni la mencionan esos que siempre tienen la palabra "recorte" en la boca. La medida es, precisamente, obligar a las farmacéuticas a hacer envases acordes a los tratamientos.
También estoy de acuerdo en que el segundo culpable son los médicos que recetan a troche y moche, y la abuela lo de toda la familia para que no paguen. Eso, con la informatización de hoy en día, sería más fácil de controlar.
Ahora bien, los usuarios también tenemos parte de culpa, y no la debemos obviar. A quién no le ha pasado que el médico además de darte las pastillas para curar una cierta enfermedad también te receta algún analgésico para el dolor, y antes de hacer la receta te pregunta si tienes (ahí no puede saber si los has consumido todos, o no, desde la última vez que te los recetó, pues depende de las veces que hayas tenido dolor). Si estás concienciado dirás que sí o no, según tengas en casa o no. Pero si no eres tan cívico, y no te van a costar dinero o te cuestan dos duros, pides que te haga receta (así ya tengo por si me hacen falta!).
Incluso los crónicos. Yo soy crónico, y te puedo decir que de cada 3 ó 4 recetas, una la tiro sin sacar el medicamento porque no llega a hacerme falta. Hay más pastillas de las que hace falta y sobran.
De todas formas, el copago no evita el problema, pero seguramente lo disminuirá. Pero, además, no creo que se haga para evitar ningún problema, sino para recaudar más dinero, porque con lo que hay no se llega.
Y lo de decir, "van a poner el copago" no es cierto. Yo ya copago mis recetas con el 40%. Ahora según el nivel de renta se quedará igual o se aumentará el copago a 50% o 60%. Sí se introduce a jubilados (excepto pensiones bajas) al 10%.
JALL, muy, pero que muy buen artículo. Aunque tengo que decir que a mí lo del copago ni me va ni me viene: llevo años "copagando" la Sanidad a mucha gente y no me han dado ni las gracias...
Es verdad no es copago, es repago, volver a pagar por algo que ya se paga, y lo de adecuar los envases a la dosis del tratamiento, no se ha propuesto ni aprobado ahora, el tema este lleva mucho tiempo, a las farmaceuticas no las torea de la noche a la mañana nadie ni siquiera el PPSOE. en mis 40 y pico años y habré ido 15 veces al médico, contadas veces , en el herbolario me apaño muy bien, nunca he pensado que pago la sanidad de otros, ni parte ni nada. Lo que no me parece nada bien es que se vaya minando mi poder adqusitivo , con pagos por aqui y por alla, cada vez me cuesta más llegar a mitad de mes, por culpa de que los politicos nos han robado y ahora no hay dinero.........
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