Alzira en la red - Publicado en Levante-EMV
El premio reconoce la apuesta “conciliadora”, ajena a complejos y sucursalismos, de la editorial valenciana desde su creación en Alzira hace 25 años. -El fundador saluda el galardón como la “guinda” a un proyecto empresarial que “en esencia era ilusión y ganas de hacer cosas”.
La editorial Bromera nació en 1986, cuando Josep Gregori se atrevió a transformar un despacho de su casa en Alzira en una empresa de letras. Veinticinco años después, el recorrido de esta aventura cultural queda patente en los cerca de 1.800 títulos publicados y los más de 400 autores que han impreso su nombre en las tapas de sus libros. Levante-EMV ha reconocido esta trayectoria con el premio Importante correspondiente al mes de octubre. El galardón se entregó recientemente en un acto en las instalaciones del diario. La editorial estuvo representada por su fundador y presidente, Josep Gregori, al que acompañaron Joan Carles Girbés (director editorial), Joan A. Llinares (gerente), Marta Estrelles (directora de comunicación) y Josep Gregori Soler. El director adjunto del periódico, Bernat Clari, fue el encargado de entregar la estatuilla conmemorativa y también estuvieron en el acto el director, Ferran Belda; el jefe de la sección de Cultura, José Ricardo Seguí, y el redactor Alfons Garcia.
“Bromera es es la versión valenciana del yes, we can”, subrayó Clari, “la muestra de que los valencianos podemos ser capaces de superar cualquier reto sin necesidad de hacer el equipaje y sin ser tutelados por terceros”. Y ello, en un entorno social que “nunca ha demostrado porosidad para aceptar los productos empaquetados en valenciano” y sin contar con unos índices de lectura que aconsejaran invertir en proyectos culturales.
Gregori reconoció que estos 25 años no han sido una carrera fácil, pero tampoco ha estado exenta de gratificaciones, como el premio Importante, que consideró “la guinda a una serie de reconocimientos que tienen el valor del afecto”. “Lo agradezco en nombre de Bromera, porque esta no es Josep Gregori, sino el alma de todas las personas que hicieron posible el proyecto y que han ido profesionalizando una editorial que en esencia era ilusión y ganas de hacer cosas”. Leer noticia completa en Levante-EMV
AG
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