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Conservar la imagen ayuda a enfrentarse a la enfermedadLa pérdida del cabello es uno de los efectos más temidos de la quimioterapia
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Cada año se detectan 150.000 nuevos casos de cáncer en España. Muchos de ellos totalmente curables. Entre los que tiene mejor tratamiento está el cáncer de mama, el más frecuente en las mujeres occidentales, de los que se diagnostican más de 20.000 cada año en nuestro país.
Uno de los tratamientos más utilizados para combatir esta enfermedad es la quimioterapia. Aunque no todas las clases de quimio son igual de agresivas; la mayoría de ellas tienen, entre otros efectos secundarios, la pérdida total o parcial del cabello, tanto en la cabeza como, en ocasiones, en otras partes del cuerpo. Esto es debido a que la raíz del pelo, como las mucosas del estómago o de la boca, son muy sensibles a los efectos de la quimioterapia.
Aunque la enfermedad se ha extendido a todos los sectores sociales y económicos y ha dejado de ser tabú para ser aceptada como una enfermedad grave, aunque no necesariamente mortal, todavía persiste el estigma para el enfermo. Como si el que padeciera cáncer estuviera señalado. Y la pérdida del cabello es una de las marcas más claras y temidas de sufrir la enfermedad.
Vivir con una actitud positiva es importante, aunque es un poco ilusorio suponer que es suficiente para superar el mal. De hecho, el enfermo suele atravesar varias etapas y puede pasar de la preocupación al optimismo. Puede sentirse muy abatido un día y al siguiente puede encontrarse con muchas ganas de luchar. Intentar encontrar el equilibrio y la normalidad es primordial. Entendiendo normalidad como continuar con la vida cotidiana en la mayor medida posible, aceptando que se padece una grave enfermedad y que el destino ha jugado una mala pasada, pero que la vida tiene que continuar.
Uno de los mayores temores que sufren las mujeres afectadas es a perder el pelo a causa de la quimioterapia. Un síntoma inequívoco de padecer la enfermedad, que a lo mejor hasta ese momento podía haberse ocultado. Para evitar padecimientos psicológicos y si el doctor ya las ha advertido de que se les caerá el cabello, lo mejor es prepararse una prótesis capilar que imite con pelo natural su color, forma y peinado. Y así, ni ellas ni sus seres allegados y amigos pasarán por el duro trago de verlas sin pelo.
Existen empresas especializadas en la confección de prótesis capilares y en pocos días pueden tomar medidas, confeccionar y servir una prótesis que imite a la perfección el cabello del paciente. Este tipo de prótesis puede llevarse permanente durante el tiempo que dure el tratamiento y se puede realizar una vida normal, incluso ducharse o ir a la piscina.
Información facilitada por David Pérez Estilistas
Más información de David Pérez Estilistas 
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