

“El PP se ha encargado de darle la vuelta a la tortilla y dejar apeados en la cuneta a este colectivo de personas que sin ayuda les cuesta valerse por sí mismas”
El pasado sábado día 14 de diciembre las personas dependientes y sus familiares no tuvieron motivos para celebrar el 7º aniversario de la aprobación de la Ley de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia. Fue aprobada por el gobierno socialista de Zapatero y con ella se reconocía el derecho de las personas que, por encontrarse en situación de especial vulnerabilidad necesitaban a terceras personas para desarrollar sus actividades diarias.
Lo que debiera ser un día de alegría se torna en un día para el desencanto. El Partido Popular se ha encargado de darle la vuelta a la tortilla y dejar apeados en la cuneta a este colectivo de personas que sin ayuda les cuesta valerse por sí mismas.
Esta Ley ha sido desmantelada a día de hoy. En 2011, antes de las elecciones, en una entrevista publicada por un rotativo de tirada nacional, Rajoy anunciaba que la "Ley de la Dependencia no era viable", y desgraciadamente es el único anuncio electoral que, a pies juntillas, ha cumplido el PP desde su llegada al poder.
En Alzira cientos de dependientes han visto como se les han reduciendo las ayudas sin que la alcaldesa, Elena Bastidas haya movido ficha para evitar que sus superiores acaben con un derecho. Desafortunadamente en Valencia ha sido muy complicada la aplicación de la Ley; el despilfarro con los grandes eventos, fórmula 1, visita del Papa y las grandes obras como el aeropuerto de Castellón o la Ciudad de la Luz en Alicante han dilapidado los recursos en manos de unos pésimos gobernantes como Camps y Fabra.
Los socialistas pensamos que es una tremenda injusticia que de los cerca de 70.000 personas con derecho a la dependencia en la Comunitat Valenciana, un tercio, pese a tenerla reconocida, no han llegado a percibir ninguna ayuda, y lo peor es que Rajoy y todos sus correligionarios del Partido Popular se han encargado de dinamitar la Ley aplicando una serie de medidas desalmadas e impropias de un estado de derecho.
Rajoy y el Partido Popular han reducido las prestaciones económicas en un 15% y eliminado las compatibilidades entre servicios; las cuidadoras profesionales han visto como desaparecía su derecho a cotizar; el dependiente que accede a una plaza en una residencia o centro de día debe pagar parte del coste, alcanzando en ocasiones el 90% en función de su capacidad económica llegando incluso a tener que hipotecar su vivienda en un 5% de su valor catastral. Pero si hay algo que pone en evidencia a los gobernantes del PP es atreverse a ampliar el periodo de seis meses a dos años sin generar retroactividad, este plazo es más que suficiente para que muchos dependientes mueran sin llegar a recibir jamás las ayudas.
Los socialista tenemos muy claro que hasta que en el PP no dejen de considerar que la Ley de Dependencia es un gasto inviable, en lugar de una inversión social, los dependientes están abocados a la exclusión social. Este es el resultado al que se han visto arrastrados por las políticas del despilfarro y grandilocuencias del Partido Popular en la Comunitat Valenciana.
El Partido Popular nos retrotrae varias décadas atrás con sus políticas haciéndonos creer entre lamentos que la culpa es "de los otros". Afortunadamente están con esa actitud en el buen camino; como escribió el periodista estadounidense, Stephen Crane, "Los lamentos son el lenguaje de la derrota".
Isabel Aguilar
Portavoz del PSOE en Alzira
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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