Dejar de fumar disminuye el riesgo de muerte súbita, mejora el sistema circulatorio y respiratorio, y reduce a la mitad el riesgo de padecer un infarto
El 23,6% de la población de la comarca de La Ribera es fumadora, lo que en términos absolutos significaría que más de 61.000 habitantes del Departamento de Salud de La Ribera son fumadores.
Esta semana se celebra la Semana Sin Humo, que culmina mañana, 31 de mayo, Día Mundial Sin Tabaco, con la que se pretende señalar los riesgos que supone el consumo de tabaco para la salud, así como la importancia de llevar a cabo políticas eficaces de reducción de su consumo. Como todos los años, el Departamento de Salud de La Ribera se ha sumado a esta iniciativa, dentro de las actuaciones que, de manera continuada, lleva a cabo con el fin de concienciar y prevenir sobre este problema de salud.
Según los últimos datos disponibles por el Grupo de Tabaquismo del Departamento de Salud de La Ribera, el consumo de tabaco en la comarca se centra entre los 16 y los 24 años, con un 36,8%, y entre los 25 y los 44 años, con un 39,2%. Con respecto a la edad de inicio, cabe destacar que el 72,9% de los fumadores de la comarca se inició antes de los 16 años, frente al 4,8% que lo hizo después de los 18 años.
Según ha afirmado la Dra. Rosa Albelda, coordinadora del Grupo de Tabaquismo de La Ribera, “todos estos datos demuestran que la situación es preocupante, especialmente respecto a los más jóvenes, por lo que es necesario que los esfuerzos que hacemos desde las organizaciones sanitarias se orienten a la educación y a la prevención del inicio del consumo”.
El consumo de tabaco está relacionado con más de una treintena de enfermedades, especialmente respiratorias y cardiovasculares, como el cáncer broncopulmonar cuya incidencia ha aumentado, en los últimos años, un 105% en hombres y un 31% en mujeres y también con los cánceres de cabeza y cuello (fosas nasales, laringe, tiroides, glándulas salivales), que tiene una incidencia anual en España de 50 casos por cada 100.000 habitantes.
Según ha afirmado la Dra. Albelda, “dejar de fumar tiene claros beneficios sobre la persona que, no solo mejora su sentido gustativo y olfativo, sino que, además, disminuye su riesgo de muerte súbita a las 8 horas de haberlo dejado, mejora su sistema circulatorio y respiratorio cuando lleva sin fumar entre 2 y 12 semanas, o disminuye a la mitad el riesgo de padecer un infarto al año de haber encendido su último cigarrillo”.
El tabaquismo tiene, además, un efecto negativo sobre los fumadores pasivos, siendo especialmente sensibles al humo del tabaco las mujeres embarazadas y la población infantil.
Con el fin de atenuar el problema del Tabaquismo en la comarca, el Departamento de Salud de La Ribera cuenta con un Plan de Prevención y Tratamiento del Tabaquismo, que se desarrolla a través de cinco estrategias básicas: informativas, asistenciales, formativas, preventivas y de investigación.
Este Plan es desarrollado por un Grupo de Tabaquismo, integrado por 40 profesionales, de manera que en cada una de las zonas básicas del Departamento de Salud existe un referente médico y de Enfermería que coordina las directrices que, en temas de Tabaquismo, realiza el Departamento de Salud.
Dentro de esta Plan, el Departamento de Salud de La Ribera lleva a cabo talleres de formación destinados a médicos y personal de Enfermería con el fin de que realicen acciones de prevención del Tabaquismo sobre la población general, a los que han asistido más de 150 profesionales.
También dentro de las acciones que contempla este Plan, el Departamento de Salud de La Ribera se suma todos los años a la celebración del Día Mundial Sin Tabaco. Para ello, este año, colocará mesas informativas en 13 centros de Atención Primaria (Alberic, Alzira I y II, L’Alcúdia, Algemesí, Albalat, Alginet, Sollana, Carcaixent, Carlet, Corbera, Sueca y Cullera) y en el Hospital Universitario de La Ribera.
En estas mesas se entregará información sobre los beneficios que supone el abandono del tabaquismo y se llevará a cabo el intercambio de tabaco por objetos, como bolígrafos, camisetas o llaveros, o por una pieza de fruta. Asimismo, a las personas interesadas, se les realizará una cooximetría (prueba que consiste en medir el monóxido de carbono presente en el aire expirado por una persona).
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