Alfredo Garés: “Una jornada agradable acompañando a la Madre a la que fue su casa”
Un año más, la tradicional romería a la Murta congregó a más de cien miembros y devotos de la Real Cofradía de Nuestra Señora de la Murta, que se reunieron a las 8 de la mañana en la iglesia de Santa Catalina para llevar a cabo la bendición a cargo del consiliario de la cofradía D. Enrique Masiá y el reparto de las cañas.
Tras la bendición se ejecutaron unas danzas típicas a cargo del Grup de Danses d’Alzira. Una vez finalizadas, la comitiva inició la marcha hacia las ruinas del antiguo monasterio de los Jerónimos, enclavado en el paraje natural del valle de la Murta, a unos 8 km de la ciudad.
Una vez allí, entronizaron a la Virgen en el altar. A continuación se realizó una ofrenda de flores y frutos por parte de asociaciones religiosas y festivas, Junta de Hermandades y Cofradías, Junta Local Fallera y una representación de la corporación municipal.
Al finalizar la santa misa, los romeros pudieron degustar una paella gigante y disfrutar del jardín Romántico de la Casona de la Murta.
Un buen día de convivencia que fue calificado por Alfredo Garés, presidente de la Real Cofradía de Nuestra Señora de la Murta, como “una jornada agradable acompañando a la Madre a la que fue su casa”.
Valcano
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