Se construye día a día y de su resultado depende nuestro modo de actuar presente y futuro
Es el valor que nos damos a nosotros mismos forja los interiores de la persona. Es el resultado de nuestra experiencia con la vida y sus consecuencias. Se construye día a día y de su resultado depende nuestro modo de actuar presente y futuro.
Nuestros hijos dependen de su autoestima (los niños y adolescentes están muy atentos a sí mismos), de la imagen que tienen de ellos mismos en su interior (puesto que es un proceso interno de la personalidad).
Parece claro que la autoestima está directamente relacionada con la persona. Por tanto también es la parte más fuertemente implicada en la conducta. Podríamos decir que muchos comportamientos desadaptados en niños y adolescentes se producen por baja autoestima. Puede ser el motivo de bajo rendimiento escolar, por ejemplo.
Los padres y madres son responsables directos, desde que el niño o la niña nacen, de sus comportamientos, de cómo piensan o sienten, de cómo se perciben. Son los máximos responsables de cómo sus hijos se autoestiman o no. La autoestima se educa.
Lo que hace la autoestima es el amor entre las personas, los afectos y las emociones equilibradas. Proporcione al niño amor incondicional, dígale que le quiere y que está orgulloso de él.
Es posible crear un ambiente agradable, libre de insultos, de tensiones o agresiones.
No se habla de sobreproteger y supervalorar a los niños. Esto puede producir un gran problema de autonomía. Es importante transmitirle sentido de la equidad, “soy como los demás son, tan importante y capaz”. Así atacamos los sentimientos de inseguridad. Además de proporcionar oportunidades para que el niño desarrolle sus habilidades en diferentes actividades que se le dan bien y de las que disfruta.
Observemos nuestros diálogos interiores. Son la muestra de cómo está la autoestima de cada uno y el ejemplo que damos a seguir a nuestros hijos.
Ayude al niño a superar posibles dificultades; por ejemplo, en los estudios o con sus amigos. De manera que se sienta comprendido y apoyado.
Es interesante llevar un registro de las buenas acciones o cosas que valoras en el niño; se puede llamar “libro de las buenas acciones”.
Expresa una manera negativa de vivir. Los sentimientos de la persona son autodestructivos. Estas personas podrían decir: “no me quieres de verdad, no me valoras, ni me amas aunque me des cosas; no me respetas y así me haces una persona insegura y problemática”.
Se está seguro de uno mismo para afrontar las cosas de la vida creciendo como persona sin límites en la ilusión, objetividad y en la autoaceptación. La persona se siente capaz de tener éxito.
Más información de Centro Psicológico
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