Todo tendrá un atisbo de normalidad
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Con la llegada del mes de septiembre, el pulso de la ciudad vuelve a tomar relativa normalidad. La adormecida y calurosa Alzira del mes de agosto abre las puertas de sus comercios y empresas, aunque hay algunos que por suerte o desgracia no han podido cerrar por vacaciones.
Los políticos retoman su frenética actividad fotográfica y todo aquello que quedó pendiente, ahora pasa a la carpeta de urgente.
Los funcionarios van calentando sus sillas, con caras largas y hablando del síndrome post-vacacional.
Por otro lado los autónomos han seguido cotizando este mes sus impuestos, aunque la facturación haya sido nula.
Parados, mendigos, inmigrantes… son los que han aguantado la tórridas tardes de de verano, la colas para recoger comida o pedir dinero, no saben de estaciones.
Con la llegada de septiembre Alzira recobrará la actividad fallera, la fiestas de la Virgen del Lluch, los niños empezarán las clases y todo tendrá un atisbo de normalidad.
Si Don Mariano José de Larra viviese ahora en Alzira, probablemente hubiese escrito no el ‘Vuelva usted mañana’ si no ‘Vuelva usted en septiembre’.
Miguel Ángel Martínez
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Martínez, que profundo te veo. Te ha faltado el toque becqueriano y poner eso de "¿volverán las oscuras golondrinas de tu balcón sus nidos a colgar?"
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