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Evita el rajado de frutos gracias a las recomendaciones de Alzicoop Además de otros consejos fitosanitarios
TRATAMIENTOS FITOSANITARIOS
ALZICOOP
Trips de la orquídea (Chaetanaphothrips orchidii)
Esta plaga hasta ahora desconocida empieza a tener una importancia en nuestros cítricos ya que cada vez es mayor su presencia.
En los cítricos se desarrolla principalmente sobre los frutos, en la zona entre dos frutos o de fruto con hoja y en la parte baja del árbol, ya que prefiere hábitats más húmedos. Puede encontrarse sobre los frutos en cualquier momento del año, incrementándose sus poblaciones a medida que el fruto se desarrolla.
Los daños se presentan como manchas bronceadas más o menos redondeadas en las zonas donde se ha producido la alimentación, normalmente las zonas de contacto entre frutas, que va adquiriendo una tonalidad más oscura conforme se avanza en el desarrollo del fruto.
Se encuentra presente en el cultivo durante todo el año, aunque las poblaciones más numerosas se dan de mayo a octubre.
Rajado de frutos
El rajado en los cítricos o splitting, es una fisiopatía que se presenta en algunas variedades de cítricos. Es un agrietamiento de la corteza del fruto cuando aún está en el árbol, generalmente antes de la maduración.
Este rajado suele iniciarse por la zona estilar y puede llegar a ocupar todo el fruto, sin embargo, algunas veces esta ruptura en la piel puede aparecer en la zona ecuatorial.
Uno de los factores que pueden influir en la aparición de esta fisiopatía es la alternancia de déficits hídricos seguidos de períodos húmedos, los cuales ocasionan que se incremente el tamaño de los gajos de los cítricos de manera más rápida que la piel. También influyen las características del suelo y los desequilibrios nutricionales.
Las aplicaciones de fitorreguladores en dos tratamientos, reducen el porcentaje de rajado en cítricos entre un 50 y un 70%, dado que mejora la resistencia de la piel.
Creasing o clareta
Esta fisiopatía afecta generalmente a las variedades del grupo Nável y en mayor proporción a la Valencia late, pudiendo llegar a causar pérdidas elevadas por destrío.
El creasing o clareta es una alteración de la corteza de los agrios que se caracteriza por la presencia de pequeñas grietas y roturas en el tejido blanco de la piel (albedo) que se corresponden con áreas de depresión en el tejido externo de la piel (flavedo).
Se admite que la clareta se origina en las primeras fases del desarrollo del fruto como consecuencia de la rotura enzimática de las paredes de las células del albedo. Los primeros síntomas de la clareta son detectables a los 8 días del cuajado, a los dos meses ya se observa la desintegración del albedo, sin embargo los síntomas solo se evidencian al inicio de la maduración.
Además del carácter genético de esta afección, se ha observado que también influye en esta alteración, el tipo de inflorescencia en donde se sitúa el fruto, las condiciones climáticas y del suelo, los periodos de sequía o las amplias fluctuaciones de humedad.
Se ha observado también que cuando las cosechas son elevadas, se incrementa la afección. Esto nos puede llevar a pensar que las mismas condiciones climáticas que promueven el desarrollo del fruto, estimulen la aparición de la clareta.
El manejo del cultivo también puede afectar a la mayor o menor incidencia de la clareta, fertilizaciones crecientes de nitrógeno incrementan ésta, mientras que elevados niveles de potasio disminuyen la incidencia de la alteración.
La aplicación de dos tratamientos espaciados un mes de ácido giberélico (20 ppm) combinado con nitrato de calcio (2%) reduce significativamente la Clareta en los cítricos.
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
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