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Delicatesen en Alzira es una iniciativa personal de Salva Llopis, partidario de una pastelería innovadora, detallista y un tanto abstracta"Los sabores han de encontrar al consumidor y no al revés"
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Salva Llopis es un joven pastelero de Alzira de 28 años, que constituye la sexta generación del horno de la calle Piletes que data del año 1850.
Su inquietud profesional, tras criarse entre la leña, la levadura y la harina del horno centenario de sus padres, le ha llevado a estudiar en las mejores escuelas de repostería de Barcelona, León, Gandía y Valencia y a trabajar en algunas pastelerías catalanas consideradas entre las 100 mejores del mundo.
Sus metas son "muy ambiciosas" y él está dispuesto a "darlo todo para ver hasta dónde puedo llegar". Para conseguirlas está dispuesto a "trabajar duro día a día y lo mejor que sé".
Sabe por qué convenció a sus padres, hace escasos meses, para poner en marcha Delicatessen, la nueva pastelería de Alzira en la que "voy a desarrollar mis experiencias". En los escasos cuatro meses que lleva abierta apenas ha desarrollado "un 35% de lo que me he propuesto realizar, pero al año que viene habré incrementado notablemente la carta de pasteles y tartas de la casa".
El pastelero alzireño define de esta forma Delicatessen: "es muy diferente a un horno, es un local de degustación destinado a gozar de experiencias nuevas y divertidas".
Y para convencer de lo que dice pone algún ejemplo; el nuevo pastel debe ser "crujiente, esponjoso, con gelatinas, en definitiva debe contar con un contraste de sabores que lo haga muy divertido". Sus creaciones están acompañadas de bombones, helados, de un buen café y, naturalmente, del buen pan legado por sus antepasados.
La inicial timidez, ante su primera entrevista periodística, la supera conforme entra en harina y le fluyen, poco a poco, en palabras todas las creaciones artísticas acumuladas en su mente tras un amplio periplo de estudios y experiencias.
Partidario de la pastelería moderna, ésta debe ser, a su juicio, "innovadora, detallista, un tanto abstracta de varias texturas y sabores diferentes que se aprecien en el paladar".
Su máxima es que "los sabores han de encontrar al consumidor y no al revés", de ahí que proponga que la porción personal de una tarta no ha de sobrepasar los 125 gramos de peso, "esta porción es suficiente para apreciar la textura y sus sabores, porque el nuevo concepto de pastelería es poca cantidad, pero con mucha calidad".
En sus creaciones destaca la bollería francesa en la que emplea "mantequilla y chocolate de primera calidad" y sus personales tartas "que son el producto de mis experiencias en las pastelerías que trabajé".
Por el momento, se pueden degustar las denominadas, Macadamia, Delica y la Choco-Leche, aunque próximamente "tengo previsto aumentar la variedad de tartas".
Salva da su toque personal a las monas de Pascua,
mezclando experiencias de Barcelona, Francia e Italia
En Delicatessen llaman la atención las pequeñas monas de Pascua que se exhiben en los mostradores, "les he dado un toque personal con todo lo que he aprendido, concretamente he hecho una mezcla entre lo que se hace en Barcelona, Francia e Italia y me ha salido una mona muy conseguida". Sin desvelar el secreto, revela que la monas ‘made in Salva’, "está en la manera de hacerlas", partiendo de productos tan tradicionales como el azúcar, la harina y la mantequilla, entre otros ingredientes.
Pero los Llopis, ayudados por una quincena de colaboradores elaboran, durante las pascuas, miles de monas con todas sus variedades, "tenemos sin azúcar, con chocolate, las normales, las de nueces y chocolate con leche caramelizada, las de pasas y nueces y las de huevo".
El joven pastelero, ya mucho más relajado pese al ritmo frenético de trabajo en la tienda y el horno provocado por la Pascua, tiene los pies en el suelo y quiere dejar plena constancia de su agradecimiento, "tengo claro que no debo confiarme" y "hoy, soy lo que soy gracias a mis padres" y poco después recapacita y añade "pon también que le debo mucho a mi hermana Reme y a mi cuñado, Quino".
Quino Bono es el arquitecto de Alzira de mayor prestigio internacional que ha diseñado la pastelería Delicatessen, en la que Salva Llopis pretende alcanzar la misma solvencia que su cuñado, pero en el sector de la repostería.
Xavier Espanya
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
simplement enhorabona¡ soc client d'aquesta nova creacio, i es un espai on poder degustar meravelles amb un cafenet i una xarradeta¡¡
espere que els alzirenys gaudim d'aquest lloc¡
simplement enhorabona es un lloc ideal.
La verdad es que por las fotografías que se muestran dan ganas de ir. No tardaré en acercarme.
Te felicito Salva Llopis, excelente local y mas excelentes tentaciones para hacer disfutar al paladar.Me alegro de la continuidad de los Llopis en el sector de la pastelería donde siempre han ocupado un lugar destacado.En tus padres Salvador y Reme tienes la enciclopedia heredada de aptitudes y actitudes para desarrollar con éxito tu creatividad e inovación en este sector.Enhorabuena.
Dan ganas de hincharse a monas!
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